África
otoño en la sabana
camioneta cargada de refugiados
perseguida entre maizales
por una jauría de hienas
en en 4x4
Bastardos!
Parados en el borde de la selva
dejé atrás aniños ancianos y mujeres
huí cobardemente solo
escapando de asesinos cazadores
por esquivos senderos.
Lo conseguiría el resto?
No creo
Di con una explanada
alta entre montañas
surcos y campos sembrados
marcados con los acid de hierba.
Era el camino
Pude llegar a las casas entre las rocas
al borde de las cordilleras
fugitivo buscando
lo que ayudase a huir,
cualquier cosa
El antiguo teléfono negro
sonaba indolente.
Hablé con una mujer
su bebé en brazos y su hijo
vestido azul oscuro de algodón
No me entendían
mandil negro
No podían
ayudar
Ya llegaban!
hay que huir!
O la montaña o la casa.
Iban rápido, no escalaría
Resguardado en el sótano
de la casa blanca
a la sombra de la sierra
mi vida en manos de aquella mujer
con sus dos niños pequeños.
Mi vida fue salvada
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