Las ridículas elecciones catalanas y el estado de la cosa nacionalista

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Corazones llenos de ira.

No sabemos cómo están los resultados, porque acaba de terminar la jornada electoral. Pero todo parece indicar que habrá mayoría de nacionalistas en el Parlament.    Por un lado, los fachas de CIU. Y por otro, los pirados de ERC.    Ambas organizaciones dicen que está en juego el soberanismo,algo a lo que nosotros no nos oponemos, está claro... la independencia de los pueblos es algo legítimo. Pero la idea de "patria" nos chirría, tanto si es chica, grande, o incluso imperio.    Lo que ocurre es que todo es mentira.

     Lo que hemos visto durante la mamarrachada de la campaña electoral no ha sido otra cosa que un pulso entre "separatistas" y "unionistas", permítasenos la expresión. El PP entró en escena inventándose no se sabe qué informes policiales (¡pues anda que se fían de algo inteligente e imparcial: la madera!) para acusar de corrupción al diablo soberanista Artur Mas, con la intención de restarle votos (es el juego al que llevan jugando PP y PSOE hace 30 años). Y el líder de CIU se ha cebado, y ha entrado al trapo, denunciando la campaña orquestada por el PP "contra el soberanismo": "se inventan corrupciones porque nos quieren boicotear el proceso de separación".

    Todo es una cortina de humo. Nada es más viejo que buscar un enemigo exterior para que el pueblo no mire al interior (bueno, quizás es más viejo lo de "divide y vencerás", pero vamos, que andan las dos estrategias muy vistas y estudiadas).

   Los fachas del PP, a lo suyo: la sacrosanta unidad de España que enarboló como bandera el dictador Franco y, de paso, desvian la atención hacia recortes y más recortes. Y los nacionalistas catalanes, erre que erre, centrando la atención de la campaña electoral en la agresividad española contra su "natural derecho a decidir su soberanía" y, de paso, desviando la atención hacia los recortes y más recortes.

    Y mientras, los bancos, –que no saben de fronteras más allá de la suiza o de los paraísos fiscales– ¡venga a desahuciar y a mandar a cientos de personas a la calle, sean de donde sean! A algunos no los consiguen desahuciar porque se suicidan, desesparados. 

  El caso es que todo ha funcionado para que CIU y ERC tengan mayoría absoluta nacionalista.   A ver: aclarémonos. El nacionalismo es de derechas. Y fascista. Y asesino. Siempre. En todas partes. Hitler era nacionalista y Mussolini y Franco y Stalin. Y los serbios Slobodan Milosevic, Radovan Karadzic o Ratko Mladic... o el zumbao noruego Andreas Breivik (en la foto). Y muchos grandes asesinos históricos fueron grandes nacionalistas.

    Total, que ante el engaño electoral, la estafa de los especuladores financieros, las mentiras, informes policiales inexistentes o existentes, y las contraréplicas soberanistas o unionistas... los que perdemos somos siempre los mismos.

    A nosotros, Cataluña nos importa la misma mierda que nos importa España.  Nos importan las gentes que viven en Cataluña y en España, eso sí. Sean de donde sean (rumanos, árabes, lationamericanos, catalanes o españoles).  Y nos importan las gentes que viven en Grecia, en Portugal, en Irlanda, en Malasia, o en la Cochinchina.  Pero esto de las elecciones"soberanistas" es una estafa aún mayor que la financiera, porque nos la venden como si fuera algo limpio, ideológico, la natural aspiración de un pueblo. Pero al final no es más que la misma mierda de siempre: dirigentes que roban, desahucian y suicidan a los dirigidos.

Para más información:  http://kaosenlared.net/component/k2/item/38625-el-cuento-independentista-de-ciu-logra-movilizar-el-voto-ultraespa%C3%B1olista-mientras-el-soberanismo-de-izquierdas-castiga-sus-recortes.html