Petete Leyendo la Constitución |
Se realiza a penas un mes después de que los presidentes de alemania y francia, representantes de sus banqueros, se lo solicitasen expresamente con el fin de "calmar a los mercados". ¿Qué será lo próximo? La simple represión. Con esta excusa sacada de un chiste se abre la veda a la inamovilidad de la constitución.
El pueblo es transformado en vulgo y no interesa. En la economía de mercado pre-2007 a un país le interesaba tener una clase media amplia porque eran los que consumían y se necesitaba primero una renta alta y endeudamiento, esto es, aporte extra de capital para incentivar el consumo y mantener el orden social. Con la revisión del créditos del 2007 ley de los números se impone, y el interés actual es mantener una población que simplemente consuma, sin excusas, sin incentivos, la masa es suficiente motor. La molesta consulta ciudadana no es necesaria, lo decisión está tomada.
Los mercados mandan, gobiernan. Pero los mercados son los bancos, que permiten la inversión y que las mercancías se muevan, por lo que los bancos mandan. El alcance de su poder llega hasta a controlar el mismísimo petróleo, tenido como el recurso natural más importante del planeta y cuyos poseedores, por ende, son los más poderosos. Una vez que el recurso participa en bolsa se pone a expensas de los inversores y juegan con leyes del mercado, es decir, de los bancos. Poco puede hacer un país productor o la OPEP para romper las reglas, ni Arabia Saudí.
Francia y alemania tienen sus propios problemas ya que colocaban el 60% de sus exportaciones en el resto de europa y es aquí donde se ha estancado el consumo. Se han visto arrastrados por la situación de sus incapaces y dependientes vasallos. Ahora exigen obediencia, y su voluntad es que se modifique la constitución.
Los países con economía de mercado pierden su soberanía si quieren seguir recibiendo suministros.
Golpe de estado. Cuando la política gobierna para el mercado lo hace para los bancos, que son los que lo soportan. Estos, finalmente, pertenecen a alguien. Por más que nos quieran confundir con cargos ejecutivos, cargos intermedios, sociedades anónimas, deslocalizaciones al extranjero, escudandose en títulos bursátiles o simplemente tecnócratas, alguien toma la decisión, no hay democracia en estas instituciones. Emilio Botín, Juan Rodriguez Inciarte o Alfredo Sáenz del Santander, Francisco Gonzalez y Angel Cano del BBVA, Rodrigo Rato y Jose Luis Olivas Martinez en Bankia, Isidro Faine Casas y Juan Marín Nin Génova de La Caixa son algunos de los directivos y ejecutivos que han tomado la decisión. Son ellos el gobierno de españa.
Como bien versan los billetes "el estado es el garante del valor del dinero", valor fiducidario, y el dinero está en los bancos. Son estos finalmente ellos los que estrangulan al estado y lo manejan como si de un títere se tratara.
Los ciudadanos estamos acostumbrados a que día a día se nos veje en nuestros trabajos, en la calle por la policía, en nuestras pocilgas-viviendas. Esta agresión contra la constitución demuestra que son 169 arículos de papel mojado, que no sirve ni para justificar su propia existencia. Nos porduce risa considerar a españa un país constitucional y un estado de derecho. Esto, a lo sumo, es un campo de concentración grande.
Huelga decir que nadie en la tarcoteca votó la constitución, nadie nos pidió permiso. Nacimos y nos insertaron en un sistema que nada esconde, te dice las cosas a la cara.
El que crea en la democracia, o es un mantenedor del sistema porque algo tiene que ganar y es nuestro enemigo o es incapazde desenvolverse eficientemente en su entorno, impedido para reconocer los peligros y señales de advertencia, y se convierte en presa para los predadores, los mantenedores del sistema, y será la primera víctima.
<<En la tarcoteca proponemos el Libro Gordo de Petete como nueva norma jurídica básica.>> dice entre risas el portavoz del blog. <<Mañana mismo comienza la recogida de firmas>>
Organicémonos, luchemos y seamos libres. Otro sistema es posible. Perdón, necesario. Salud.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinión es importante