La tarcoteca

by Pablo Heraklio, PHkl/tctca. Contact at Tarcoteca@riseup.net

miércoles, 30 de septiembre de 2020

Carta a una Amiga Preocupada por el Colapso: ¡Viva el Fin del Capitalismo!

Una buena amiga me escribía estos días un email un tanto turbada por la situación global y el colapso en ciernes que, si no se nos avecina, ya está aquí. Esta es la carta que le escribí a Diana, una compañera de las imprescindibles que también cuida de la tarcoteca. Desde aquí un abrazo:

<<Me honras al tenerme de referencia. Intentaré ser breve, va a ser difícil.

Traté el colapso en el post 'Los Puntos Débiles del Capitalismo, Radiografía del Colapso y perspectivas Revolucionarias' y a él me remito. Los que más saben son los que más tienen que perder y que ganar, estos son la élite, los datos son extraídos de la ONU y del WEF. También se podría haber echado un vistazo al FMI, al CCAES español o informes bancarios del BBVA, Santander etc.

Primero hay que distinguir entre crisis, una decaída de la actividad del sistema recuperable, y colapso, una decaída irrecuperable. Después hay que reconocer el sistema. Este se compone de numerosos puntos de control y subsistemas. Y por último los eventos disparadores posibles (pandemia, guerra, sequía, inundaciones...), su incidencia y su impacto. Con esto ya tendríamos un mapa y una brújula. En resumen, en un sistema complejo se producen constantemente crisis y colapsos. Los eventos de crisis globales son raros, y los colapsos globales más aún. Pero la acumulación de problemas irresueltos en forma de crisis aumentan su frecuencia, que si son demasiado rápidos no se pueden compensarse. Ejemplos hay cientos.

Cada crisis es respondida y puede ser utilizada entendiendo que la concentración de poder requiere de una energía y medios materiales que lejos de acumularse pierden porque se dispersan. En 2008 colapsó el sistema en general. En España fue brutal, quiebra de bipartidismo en 2014 y alzamiento de nacionalismo el 1-O en 2017. Lo mismo en Europa: chalecos amarillos 2018 y brexit 2016. En sudamérica en 2019 oleada de insurrecciones. En 2020 el supuesto colapso no es más que una reverberación de los problemas acumulados en 2008. Aunque tal vez la mayor crisis sistémica fuera la del petróleo de 1973.

¿Y toda esta verborrea a qué sirve? ¿A ponerte la cabeza del revés?

A ver si me explico, y seré meridiano: LO QUE COLAPSA NO ES LA CIVILIZACIÓN, NI EL MUNDO, NI LOS ANIMALES, NI LA NATURALEZA: ES EL CAPITALISMO.

Como vivimos una fase de acumulación de crisis evidente la sensación de desasosiego es generalizada. Porque son capitalistas con valores capitalistas que sufren por no poder elegir entre 20 tipos de mayonesa. No hay que dejarse llevar por la desesperanza ni el sensacionalismo eso es lo que pretenden las élites con sus toneladas de propaganda, que acudamos a ellos a por consuelo. Ellos lloran por sí mismos, por su propia desgracia, ni por ti, ni por la naturaleza, ni por mi.

Sigo viendo la serie [Colapso], una no tan ficción sobre la tercer mundización de Europa. También he visto otros como El Apocalipsis del Petróleo etc... Lo que indica está claro, la gente perdida, sin referentes, no sabe qué hacer, se morirán de hambre... caníbales... necesitamos una pistola... y un ejército. ¡Oh si, el ejército nos salvará! Propaganda capitalista. Miedos de capitalistas. Nosotros el pueblo nos uniremos y encontraremos soluciones, como siempre.

La gente seguirá al que le de pan, no esperanza. Es el estómago vacío el que inflamará los corazones. Mientras alguien, el estado, la ONU, el BCE, FMI... provea de comida, agua y algo de electricidad, el pueblo estará apaciguado. Como ejemplo los gobiernos de medio mundo han distribuido rentas entre los parados, muy alejado del ideal capitalista de explotación y consumo (por eso Zizek hablaba del fin del capitalismo, aunque aún pueda dar coletazos).

Pero eso no es suficiente. Se necesitan medios de desinformación, de represión, escuela y ahora dinero para que la gente no se una. Van pique, sin remedio (aquí la fecha para el fin del capitalismo).

La gente se unirá. Primero habrá revueltas como estamos viendo a nivel mundial, y después organización, como toda la vida. Que una revuelta siga uno u otro rumbo dependerá de los actores. Pero de nada servirán si la mencionada acumulación de problemas prosigue. Por eso ni austeridad ni gasto público son solución. Ni socialdemocracia ni fascismo. Ni guerras, ni paz. Ni autarquías ni alianzas. No van a la raíz del problema. Dan vueltas como polillas a un farol. A la postre las élites perderán sus riquezas, porque para sobrevivir como especie se las tendremos que quitar.

Nuestro mayor peligro es la destrucción ambiental, amén de guerra nuclear, y repito, la única posibilidad de supervivencia como especie, pueblos desposeídos, es la organización y lucha por el poder creando contrapoderes. Porque lo que colapsa no es nuestro sistema de valores, es el suyo!!! Por eso tienen tanto miedo y hacen tanto ruido. Quieren que aceptemos sus pueriles soluciones. Reciclar bolsas de plástico, cocacola sin pajita, coches eléctricos... Nos toman por gilipollas, como siempre. Jamás! Se lo vamos a arrebatar todo.

Para terminar una pincelada, en el corto plazo ya vemos cambios, aunque parece que no gustan. A mi no todos, pero muchos si. En el medio plazo cambios geopolíticos de envergadura: alzamiento de china, Fortress America, independencia de Europa y África, USA abandona medio oriente. En el largo plazo un lento declinar de la población y los servicios, como si fuésemos atrás en el tiempo salpicado por cisnes negros que se convierten en enjambres. Tal vez veamos animales de tiro por las calles y barcos de vela, como cuando se desmecanizó la URSS. Sería hermoso.

Bueno Diana no quiero aburrirte. No sé si te he iluminado o te habré creado mayor confusión. Yo personalmente apuesto por los Humanos, apuesto por la Naturaleza y apuesto por el Comunismo Libertario. Un Abrazo D.

Salud! PHkl/tctca>>

sábado, 26 de septiembre de 2020

Hiperinflación, Fascismo y Guerra: Cómo el Nuevo Orden Mundial puede ser derrotado una vez más

Un ensayo largo, sorprendente y realmente apasionante. Una historia de lucha de poder de bloques por el control del futuro eliminada hábilmente de los libros de historia por los mismos que venden libros. Quedaros con las maniobras, porque son las mismas que vimos, vemos y veremos en un futuro cercano: MAGA, Green New Deal, Great Global Reset, QE, supremacismo, Crisis y fascismo; mucho fascismo. Cuando te cuentan toda la Historia la historia cambia. 

Se les ha vencido y se les volverá a vencer. 

Salud! PHkl/tctca

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Traducción tarcoteca - Hyperinflation, Fascism and War: How the New World Order May Be Defeated Once More | The Vineyard of the Saker 19.9.2020 por Matthew Ehret vía Global Research


Si bien la atención del mundo es absorbida por los cambios tectónicos que se desarrollan en Estados Unidos como una tormenta perfecta para una  Guerra Civil y un Golpe Militar y amenazan con deshacer tanto las próximas elecciones como los mismos cimientos de la república, algo siniestro ha aparecido "fuera del radar " de la mayoría de los espectadores. Este algo es un Colapso Financiero de los bancos transatlánticos que amenaza con desatar el caos en el mundo. Es este colapso el que subyace en los desesperados esfuerzos que está guiando el impulso neoconservador hacia una Guerra Total con Rusia, China y otros miembros de la creciente Alianza Mutlipolar en la actualidad.

En artículos recientes, mencioné que la "solución" adoptada por el Banco de Inglaterra para este estallido financiero inminente de la burbuja de derivados de $ 1.500 billones [10^12] está siendo vendido al público con el envoltorio del "Gran Reinicio Global", que es un burdo y desesperado intento de usar al COVID-19 como tapadera para la imposición de un nuevo sistema operativo del orden mundial post-covid. Dado que las nuevas "reglas" de este nuevo sistema son muy similares a la "solución" del Banco de Inglaterra de 1923 para el caos económico vivido en Alemania, que finalmente requirió de un mecanismo de gobierno fascista para imponerlo a las masas, deseo profundizar en las causas y los efectos del completamente innecesario colapso de la Alemania de Weimar por la hiperinflación y el caos durante el período de 1919-1923.

En este ensayo iré más allá, para examinar cómo esos mismos arquitectos de la hiperinflación estuvieron cerca de establecer una 'Dictadura Global de Banqueros' en 1933 y cómo ese primer intento de un Nuevo Orden Mundial afortunadamente  descarriló gracias de una lucha audaz que se ha eliminada de los libros y de la memoria de la historia popular.

Investigaremos en profundidad cómo estalló una gran guerra dentro de Estados Unidos liderada por patriotas antiimperialistas en oposición a las fuerzas de Wall Street y el Deep State de Londres, y examinaremos cómo este choque de paradigmas llegó a su punto crítico en 1943-1945.

Este estudio histórico no se está llevando a cabo por entretenimiento, ni debe verse como un ejercicio puramente académico, sino que ha tenido que ser escrito por el simple hecho de que el mundo está llegando a un colapso sistémico total y a menos que se muestren a la luz ciertos hechos suprimidos de la historia del siglo XX, esas fuerzas que han destruido nuestra memoria colectiva de lo que alguna vez fuimos permanecerán en el asiento del conductor mientras la sociedad entrará en una nueva era de fascismo y guerra mundial.

Versalles y la Destrucción de Alemania

Gran Bretaña había sido la principal mano negra detrás de la orquestación de la Primera Guerra Mundial y la destrucción de la potencial alianza germano-ruso-estadounidense-otomana que había comenzado a tomar forma a fines del siglo XIX, como descubrió (aunque lamentablemente tarde) el estúpido Kaiser Wilhelm [Guillermo II] cuando reconoció que: “El mundo se verá envuelto en la más terrible de las guerras, cuyo objetivo final es la ruina de Alemania. Inglaterra, Francia y Rusia han conspirado para nuestra aniquilación… esa es la verdad desnuda de la situación que fue generada lenta pero inexorablemente por Eduardo VII”.

Así como la oligarquía británica organizó la 1ª Guerra Mundial, también organizó la conferencia de reparaciones en Francia que, entre otras cosas, impuso los imposibles reembolsos de deuda a una Alemania derrotada, y creó así la Sociedad de Naciones, que estaba destinada a convertirse en el instrumento para el advenimiento de un “Orden Mundial post-Estado nación ”. Lloyd George [primer ministro] encabezó la delegación británica junto a su asistente Philip Kerr (Lord Lothian), Leo Amery [secretario de estado], Lord Robert Cecil y Lord John Maynard Keynes [archiconocido ministro de economía], quienes desarrollan una agenda a largo plazo para lograr la dictadura global [en torno al colonialismo del imperio británico]. Todas estas figuras eran miembros del reciente y emergente Movimiento de la Mesa Redonda, que había tomado el control total de Gran Bretaña al derrocar al anterior Primer Ministro Asquith en 1916, y que aún permanece en el corazón del "estado profundo" británico de hoy.

Después de que el Armisticio de 1918 desmantelase el ejército y la marina de Alemania, la otrora poderosa nación se vio obligada a pagar la imposible suma de 132 mil millones de marcos de oro a los vencedores y tuvo que ceder territorios que representan el 10% de su población (Alsacia-Loraine, Ruhr y Silesia del Norte), que constituía el 15% de su tierra cultivable, el 12% de su ganado, el 74% de su mineral de hierro, el 63% de su producción de zinc y el 26% de su carbón. Alemania también tuvo que ceder 8000 locomotoras, 225 000 vagones y todas sus colonias. Fue un día de campo para el saqueo moderno.

Alemania se quedó con muy pocas opciones. Se aumentaron los impuestos y se redujeron por completo las importaciones mientras que se incrementaron las exportaciones. Esta política (que recuerda a las técnicas de austeridad que aplica a día de hoy el FMI ) fracasó por completo, ya que ambas cayeron un 60%. Alemania renunció a la mitad de su reserva de oro y aún con todo apenas se logró pagar una mínima parte de la deuda. En junio de 1920 se tomó la decisión de iniciar una nueva estrategia: aumentar la impresión de dinero [técnica hoy usada por los bancos centrales llamada Expansión Cuantitativa]. En lugar de la "cura milagrosa" que los desesperados monetaristas creían tontamente que sería, esta solución avocó a una devaluación asintótica de la moneda e hiperinflación. Desde junio de 1920 hasta octubre de 1923, la oferta monetaria en circulación se disparó de 68,1 marcos de oro a 496,6 trillones [10^18] de marcos de oro. En junio de 1922, se intercambiaron 300 marcos por 1 dólar y en noviembre de 1923 ¡se necesitaban 42 billones de marcos para obtener 1 dólar! Todavía hay imágenes circulando de alemanes empujando carretillas llenas de dinero en efectivo por la calle, solo para comprar una barra de mantequilla y pan (1 kg de pan se vendió a 428 mil millones de marcos en 1923).


Con la pérdida de valor de la moneda, la producción industrial cayó en un 50%, el desempleo aumentó a más del 30% y la ingesta de alimentos colapsó a menos de la mitad de los niveles de ante guerra. La película de 1922 del director alemán Fritz Lang Dr. Mabuse (El jugador) reflejó la locura del colapso de la población alemana en la locura especulativa bursátil cuando aquellos que tenían los medios comenzaron a apostar contra el propio marco alemán para protegerse a sí mismos, lo que solo ayudó a acelerar el colapso del marco desde dentro. Esto recuerda mucho a lo que los estadounidenses de hoy hacen con las ventas en corto del dólar en lugar de luchar por una solución sistémica.

#FritzLang Dr. Mabuse, der Spieler (1922) Dir. Fritz Lang

https://www.youtube.com/watch?v=zME775cE_gI

Hubo Resistencia

Los efectos secundarios del Tratado de Versalles [1919] no eran desconocidos y el destino teñido en Nazis para Alemania estaba predeterminado. Es un hecho comprobable y que a menudo se deja fuera de los libros de historia que las fuerzas patrióticas de Rusia, Estados Unidos y Alemania intentaron valientemente cambiar la trágica trayectoria de hiperinflación y fascismo que HABRÍA EVITADO el ascenso de Hitler y la Segunda Guerra Mundial si sus esfuerzos no hubieran sido saboteados.

Desde los mismos Estados Unidos, un nuevo equipo presidencial bajo el liderazgo de William Harding revirtió rápidamente la agenda pro-Liga de Naciones del obstinadamente anglófilo presidente Woodrow Wilson. Un importante industrial estadounidense llamado Washington Baker Vanderclip, que lideró el mayor acuerdo comercial del mundo en la historia con Rusia por una suma de $ 3 mil millones en 1920, describió a Wilson como "un autócrata inspirado en el gobierno británico [dictador]". A diferencia de Wilson, el presidente Harding apoyó el acuerdo comercial entre Estados Unidos y Rusia y socavó la Liga de las Naciones al reforzar la soberanía de Estados Unidos declarando tratados bilaterales con Rusia, Hungría y Austria fuera del control de la liga en 1921. El recientemente formado Movimiento de Mesa Redonda en América, británico, (creado a semejanza del Consejo de Relaciones Exteriores) no estaba satisfecho.

[Momento Clave: el asesinato del Presidente Harding en 1923]

Justo cuando Harding estaba maniobrando para reconocer a la Unión Soviética y establecer una entente con Lenin, el gran presidente comió por casualidad "unas ostras malas" y murió el 2 de agosto de 1923. Si bien nunca se realizó una autopsia, su muerte trajo una década de control para los anglófilos de Wall Street [aliados con la City de Londres] en América y puso fin a toda atisbo de oposición al Gobierno Mundial por parte de la Presidencia. Este período dio como resultado la burbuja impulsada por la especulación de los alocados años 20, cuyo colapso el Viernes negro de 1929 casi desató un infierno fascista en Estados Unidos.

El Tratado de Rapallo Rusia y Alemania saboteado: [fascistas asesinan al Ministro de Exteriores alemán]

Después de meses de organización, los principales representantes de Rusia y Alemania acordaron una solución alternativa al Tratado de Versalles que habría dado nueva perspectiva a los patriotas alemanes [de tintes comunistas] y establecido una poderosa amistad ruso-alemana en Europa que habría alterados varias nefastas agendas.

Bajo el liderazgo del industrial alemán y ministro de Relaciones Exteriores, Walter Rathenau, y su homólogo, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Georgi Chicherin, el tratado se firmó en Rapallo, Italia el 16 de abril de 1922, con la premisa del perdón de todas las deudas de guerra y la renuncia a todas las reclamaciones territoriales de cualquier lado. El tratado decía que Rusia y Alemania "cooperarían con un espíritu de buena voluntad mutua en pos de satisfacer las necesidades económicas de ambos países".

Cuando Rathenau fue asesinado por una célula terrorista llamada Organización Cónsul [fascista, por supuesto] el 24 de junio de 1922, el éxito del Tratado de Rapallo perdió fuerza y ​​la nación cayó en una ola aún más profunda de caos e impresión de dinero. La Organización Cónsul había tomado la iniciativa en el asesinato de más de 354 figuras políticas alemanas entre 1919-1923, y cuando fueron prohibidos en 1922, el grupo simplemente cambió su nombre y se transformó en otros grupos paramilitares alemanes (como el Freikorps) convirtiéndose en el brazo militar del nuevo Partido Nacionalsocialista.

1923: Se impone la solución de la City de Londres

Cuando el estallido hiperinflacionario de Alemania resultó en la total ingobernabilidad del estado, la solución tomó la forma del “Plan Dawes” de Wall Street [1924], que requirió del uso de un golem adiestrado en Londres llamado Hjalmar Schacht. Presentado por primera vez como Consejero de la Moneda en noviembre de 1923 y pronto como presidente del Reichsbank, el primer acto de Schacht fue visitar al gobernador del Banco de Inglaterra, Montagu Norman, en Londres, quien le proporcionó a Schacht un plan para proceder a la reestructuración económica de Alemania. Schacht volvió a “solucionar” la crisis con el mismísimo veneno que la provocó [impresión de moneda más austeridad].

Primero anunció una nueva moneda llamada "rentenmark" establecida en un valor fijo de intercambio de 1 billón de reichsmarks por 1 nuevo rentenmark. Los alemanes fueron robados una vez más. Esta nueva moneda operaría bajo “nuevas reglas” nunca antes vistas en la historia de Alemania: las privatizaciones masivas resultaron en conglomerados angloamericanos que compraban empresas estatales. IG Farben, Thyssen, Union Banking, Brown Brothers Harriman, Standard Oil, JP Morgan y Union Banking tomaron el control de las finanzas, los intereses mineros e industriales de Alemania bajo la supervisión de John Foster Dulles, Montagu Norman, Averill Harriman y otros actores del estado profundo. Esto fue popularmente expuesto en la famosa película Los juicios de Nuremberg de 1961 de Stanley Kramer.

Judgment at Nuremberg (1961) - The Guilt of the World Scene (8/11) | Movieclips

https://www.youtube.com/watch?v=lbqDuUjm4aU

Acto seguido Schacht recortó el crédito a las industrias, aumentó los impuestos e impuso una austeridad extensiva sobre el "gasto inútil". 390 000 funcionarios fueron despedidos, los sindicatos y la negociación colectiva fueron destruidos y los salarios se recortaron en un 15%.

Como se puede imaginar, esta destrucción de la vida después del infierno de Versalles fue intolerable para el pueblo y los disturbios civiles comenzaron a estallar en formas que incluso los poderosos banqueros de Wall Street-Londres (y sus mercenarios) no pudieron controlar. Se necesitaba otro agente, libre de los obstáculos de las instituciones democráticas de la república alemana, para imponer la economía de Schacht al pueblo. Un pintor fracasado que arengaba a la chusma y que había sido coreado en el Beerhall Putsch el 8 de noviembre de 1923 era perfecto [si, nuestro amigo Adolf].

Un último intento para salvar a Alemania

Aunque Hitler creció en poder durante la próxima década de la economía Schachtiana, el republicanismoe hizo un último esfuerzo para evitar que Alemania se hundiera en un infierno fascista con la victoria electoral de noviembre de 1932 del general Kurt von Schleicher como canciller de Alemania. Schleicher había sido co-arquitecto del pacto de  Rapallo junto con Rathenau una década antes y era un firme defensor del programa de obras públicas y mejoras internas de la Friedrich List Society promovido por el industrial Wilhelm Lautenbach [y acorde con los postulados keynesianos]. El apoyo público del partido nazi se derrumbó y se fue a la quiebra. Hitler había caído en depresión e incluso estaba contemplando el suicidio cuando la élite angloamericana asestó "un golpe de estado legal" como resultado de la inyección de fondos de Wall Street a las arcas nazis.

El 30 de enero de 1933 Hitler ganó la Cancillería donde rápidamente tomó poderes dictatoriales bajo el "estado de emergencia" causado por la quema del Reichstag en marzo de 1933. 

En junio de 1934, se desató la Noche de los Cuchillos Largos, en que el general Schleicher y cientos de otros patriotas alemanes asesinados, y solo pasaron unos años hasta que el monstruo de Frankenstein de la City de Londres-Wall Street arrasó el mundo.

Cómo se Orquestó el Crash de 1929

Si bien todo el mundo sabe que la caída del mercado de 1929 desató cuatro años de infierno en Estados Unidos que rápidamente se extendieron por Europa conocidos como la Gran Depresión, no mucha gente se ha dado cuenta de que esto no era inevitable, sino que más bien se trató de una explosión controlada.

Las burbujas de la década de los 20 fueron desencadenadas a partir de la temprana muerte del presidente William Harding en 1923 y crecieron bajo la cuidadosa guía del presidente de JP Morgan, Coolidge, y del financiero Andrew Mellon (secretario del Tesoro), quienes desregularon los bancos, impusieron la austeridad en el país y elaboraron ​​un plan de préstamos para corredores de bolsa que permitió a los especuladores pedir prestado el 90% de sus acciones. Wall Street fue desregulado, las inversiones en la economía real se detuvieron durante la década de los 1920 y la locura se convirtió en la norma. En 1925, los préstamos a los brokers ascendieron a $ 1.5 mil millones y crecieron a $ 2.6 mil millones de la época en 1926 y tocaron techo en los $ 5.7 mil millones a finales de 1927. ¡Para 1928, el mercado de valores estaba cuatro veces sobrevalorado!

Cuando la burbuja estuvo lo suficientemente inflada se decidió el momento para coordinar el “retorno masivo” de los préstamos de los brokers. Como era de esperar, nadie pudo pagarlos, lo que resultó en un colapso de los mercados. Aquellos "informados" se pusieron las botas con los "clientes preferentes" de JP Morgan y otros gigantes financieros que vendieron sus acciones antes del planeado colapso y luego compraron activos físicos de Estados Unidos a centavo de dólar. Una persona notable que hizo su fortuna de esta manera fue Prescott Bush del Brown Brothers Harriman, quien rescató a un partido nazi en bancarrota en 1932 [el NSDAP alemán]. Estos financieros tenían una estrecha alianza con la City de Londres y coordinaban sus operaciones a través del sistema bancario central privado de la Reserva Federal de Estados Unidos y el Banco de Pagos Internacionales.

A lo largo de la Gran Depresión, la población fue llevada a su límite de resistencia haciendo a Estados Unidos altamente susceptible al fascismo, a la vez que el desempleo se disparaba al 25%, la capacidad industrial colapsó en un 70% y los precios agrícolas cayeron muy por debajo del costo de producción, acelerando las ejecuciones hipotecarias y suicidios. Los ahorros de toda la vida se perdieron con la quiebra de 4000 bancos.

Esta desolación campó libre por toda Europa y Canadá con fascistas pro eugenesia ganando popularidad en todos las facetas de la vida. Inglaterra vio el surgimiento de la 'Unión Británica de Fascistas de Sir Oswald Mosley' en 1932, el Canadá inglés tenía su propia variante fascista con la 'Liga por la Reconstrucción Social  Beca Rhodes "Sociedad Fabiana"'  (que más tarde se hizo con el control del Partido Liberal) pidiendo la "gestión científica de sociedad" [lo que ahora se llama tecnocracia]. La revista Time había puesto en portada a Il Duce más de 6 veces tan solo en 1932 y se le dijo a la gente por activa y por pasiva que el fascismo corporativo sería la solución económica final a todos los problemas económicos de Estados Unidos.

En medio de la crisis, la City de Londres se auto apartó del patrón oro en 1931, lo que supuso un golpe paralizante para los EEUU, ya que resultaría en una fuga de oro de EEUU que provocaría una contracción aún más profunda de la oferta monetaria y, por lo tanto, la incapacidad de responder a la depresión. Los productos británicos simultáneamente inundaron los Estados Unidos aplastando la poca producción que quedaba.

Fue en esta atmósfera donde se desarrolló una de las batallas menos comprendidas en 1933.

1932: Intento de la Dictadura Bancaria Global [del BPI]

En Alemania, una victoria sorpresa del general Kurt Schleicher provocó la derrota aplastante del partido nazi dirigido por Londres en diciembre de 1932, amenazando con liberar a Alemania de la tiranía del Banco Central [gobernado por el agente británico H. Schacht] . Unas semanas antes de la victoria de Schleicher, Franklin Delanore Roosevelt FDR ganó la presidencia en Estados Unidos amenazando con regular los bancos privados y reafirmar la soberanía nacional sobre las finanzas.

Al ver que sus planes para implantar un fascismo global se desvanecían, la City de Londres anunció que debía crearse un nuevo sistema global controlado por los bancos centrales a toda prisa. Su objetivo era utilizar la crisis económica como excusa para quitar a los estados nacionales cualquier tipo de poder sobre las políticas monetarias, al tiempo que aumentaban el poder de los bancos centrales independientes como ejecutivos de unos “presupuestos globales equilibrados”. 

En diciembre de 1932, la Liga de Naciones organizó una conferencia económica "para estabilizar la economía mundial" bajo la dirección del Banco de Pagos Internacionales (BPI, BIS en inglés) y el Banco de Inglaterra BoE. El BPI se estableció como "el Banco Central de los Bancos Centrales" en 1930 para facilitar el pago de la deuda de la Primera Guerra Mundial y fue un instrumento vital para financiar a la Alemania nazi, mucho después de que comenzara la Segunda Guerra Mundial [ver Banking with Hitler]. La Conferencia Económica de Londres reunió a 64 naciones del mundo bajo un ambiente controlado presidido por el Primer Ministro británico e inaugurado por el mismísimo Rey.

Una de las Resoluciones aprobadas por el Comité Monetario de la Conferencia declaraba:

“La conferencia considera fundamental, a fin de brindar un patrón oro internacional [controlado y fijado mundialmente por Inglaterra] con el mecanismo necesario para un funcionamiento satisfactorio, que se creen bancos centrales independientes, con las facultades necesarias y la libertad para llevar a cabo una política monetaria y crediticia adecuada en los países desarrollados que no cuentan en la actualidad con una institución bancaria central adecuada ” y  “ la conferencia desea reafirmar la gran utilidad de la estrecha y continua cooperación entre los Bancos Centrales. El Banco de Pagos Internacionales debe desempeñar un papel cada vez más importante no solo mejorando el contacto, sino también como instrumento para la acción común ”.

Haciéndose eco de la moderna fijación del Banco de Inglaterra en el "equilibrio matemático", las resoluciones establecían que el nuevo patrón oro global controlado por los bancos centrales era necesario "para mantener un equilibrio fundamental en la balanza de pagos" de los países. La idea era privar a los estados nacionales de su poder de generar y dirigir crédito para su propio desarrollo.

Roosevelt torpedea la Conferencia de Londres

La resistencia del Canciller Schleicher a la dictadura de los banqueros se resolvió con un "golpe suave" que derrocó al patriótico líder en favor de Adolph Hitler (bajo el control de un títere del Banco de Inglaterra conocido como Hjalmar Schacht) en enero de 1933. Schleicher fue asesinado al año siguiente. En Estados Unidos, se frustró un intento de asesinato a Roosevelt el 15 de febrero de 1933 cuando una mujer le quitó el arma de la mano a un anarquista-francmasón [sic, nada en la bibliografía de Giuseppe Zangara lo demuestra, ni declaraciones y ningún grupo lo reivindicó] en Miami, resultando en la muerte del alcalde de Chicago, Cermak.

Sin el cadáver de Roosevelt, la conferencia de Londres encontró una barrera infranqueable, ya que Roosevelt [que representaba al poder industrial nacional] se negó a permitir la cooperación estadounidense [con la Alemania nazi]. Roosevelt reconoció la necesidad de un nuevo sistema internacional, pero también sabía que tenía que ser organizado por estados nacionales soberanos subordinados al bienestar general del pueblo y no por bancos centrales dedicados al bienestar de la oligarquía. Antes de que se diera cualquier cambio internacional, los estados nacionales castrados por los efectos de la Gran Depresión primero tendrían primero que recuperarse económicamente para poder mantenerse por encima del poder de los financieros.

En mayo de 1933, la Conferencia de Londres fracasó cuando Roosevelt se quejó de que la incapacidad de la conferencia para abordar los problemas reales de la crisis "es una catástrofe que escala al nivel de tragedia mundial" y esa fijación con estabilidad a corto plazo eran "viejos fetiches de los llamados banqueros internacionales". 

Roosevelt continuaba: “Estados Unidos busca el tipo de dólar que, de aquí a una generación, tenga el mismo poder adquisitivo y de pago de deudas que el valor en dólares que esperamos alcanzar en un futuro próximo. Ese objetivo significa más para el bien de otras naciones que una tasa fija durante uno o dos meses. La tasa de fijación del tipo de cambio no es la verdadera respuesta".

Los británicos emitieron un comunicado oficial diciendo que "la declaración estadounidense sobre estabilización hace completamente inútil continuar la conferencia".

La guerra de Roosevelt contra Wall Street [el New Deal]

El nuevo presidente tiró el guante en su discurso inaugural el 4 de marzo de 1933 diciendo: “Los cambistas han huido de sus altos asientos en los templos de nuestra civilización. Ahora podemos restaurar esos templos en las antiguas verdades. La medida de la restauración radicará en la medida en que apliquemos valores sociales más nobles que el mero beneficio monetario”.

Roosevelt declaró una guerra a Wall Street en varios niveles, comenzando por su apoyo a la Comisión Pecorra, que envió a miles de banqueros a prisión y expuso las actividades criminales del nivel más alto de la cúpula de poder de Wall Street para incitar la Depresión, comprando cargos políticos y alentando el fascismo. 

Ferdinand Pecorra, que dirigía la comisión, estaba apuntando contra el Estado Profundo cuando declaraba que "este pequeño grupo de financistas de alto nivel, controlando cada uno de los resortes de la actividad económica misma, tiene más poder real que cualquier grupo similar en los Estados Unidos".

El ámpliamente publicitado éxito de Pecorra dio poder a Roosevelt para imponer una regulación radical en forma de; 

1) separación bancaria por la ley Glass-Steagall, 

2) reorganización de quiebra y 

3) la creación de la Comisión de Seguridad de Intercambios Monetario para la supervisión de Wall Street. 

Lo más importante es que Roosevelt le quitó el poder a la Reserva Federal 'Fed' controlada desde Londres al instalar a su propio hombre como presidente (el industrial Mariner Eccles), quien la obligó a obedecer órdenes nacionales por primera vez desde 1913, mientras creaba un mecanismo de préstamos "alternativo" fuera del control de la Fed llamado Reconstruction Finance Corporation (RFC), que se convirtió en el principal prestamista de infraestructura de Estados Unidos durante la década de 1930 [banco nacional].

Una de las políticas más controvertidas por las que se demoniza a Roosevelt en la actualidad fue su abolición del patrón oro. El patrón oro en sí constreñía la oferta monetaria a un estricto intercambio de oro por dólar de papel, con lo que se prevenía [por la escasa expansión del crédito posible] así la construcción de las mejoras internas necesarias para reactivar la capacidad industrial y poner a los millones de desempleados a trabajar de nuevo, para los cuáles no existían recursos financieros. Su manipulación por parte de los financieros internacionales lo convirtió en un arma de destrucción en lugar de herramienta de creación en aquel momento. Dado que los precios de los productos básicos habían caído por debajo de los costos de producción, era vital aumentar el precio de los bienes bajo la forma de "inflación controlada" para que las fábricas y granjas pudieran volverse solventes y, lamentablemente, el patrón oro lo impedía. Roosevelt impuso aranceles proteccionistas para favorecer la recuperación agroindustrial en todos los frentes, poniendo fin a años de 'libre comercio' rapaz.

Roosevelt expresó su filosofía político-económica en 1934: “La vieja y falaz noción de los banqueros por un lado y el gobierno por el otro, como unidades más o menos iguales e independientes, ha desaparecido. El gobierno, por la necesidad de las cosas, debe ser el líder, debe ser el juez, de los intereses en conflicto de todos los grupos de la comunidad, incluidos los banqueros”.

El verdadero New Deal

Una vez liberado de las cadenas de los bancos centrales, Roosevelt y sus aliados pudieron iniciar una recuperación genuina al restaurar la confianza en la banca. A los 31 días de su feriado bancario, el 75% de los bancos estaban operativos y se creó la Federal Deposit Insurance Corp FDIC para asegurar los depósitos. Se dio trabajo inmediato a 4 millones de personas, y se construyeron y dotaron de personal cientos de bibliotecas, escuelas y hospitales, todos financiados a través del mencionado RFC. La primera alocución de Roosevelt [fireside chat] fue vital para reconstruir la confianza en el gobierno y los bancos, y sirve incluso hoy día como una sólida lección sobre banca que aún los banqueros centrales no quieren que aprendamos.

Entre 1933 y 1939, se construyeron 45 000 proyectos en infraestructuras. Los múltiples proyectos "locales" fueron regidos, como la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China de hoy, por un "Gran Diseño" que FDR denominó  "Las Cuatro Esquinas" representadas por 4 zonas de desarrollo de megaproyectos como el área de la Autoridad del Valle de Tennessee en el sureste, la Zona del Tratado del Río Columbia en el noroeste, la Zona de St Laurence Seaway en el noreste y la Zona de la presa Hoover / Colorado en el suroeste. Estos proyectos fueron transformadores en términos que el dinero nunca podrá medir, ya que la alfabetización del área de Tennessee aumentó del 20% en 1932 al 80% en 1950, y los remansos racistas del sur se convirtieron en los cimientos de la industria aeroespacial de Estados Unidos debido a la abundante y barata energía hidroeléctrica. Como ya se había informado en 'the Saker', Roosevelt no era keynesiano (aunque no se puede argumentar que los enjambres de expertos fabianos de la "Rhodes Scholar" que penetraron su administración no lo fueran).

Wall Street saboteó el New Deal

Aquellos que critican el New Deal hoy ignoran el hecho de que sus fracasos tienen más que ver con el sabotaje de Wall Street que con fallos intrínsecos al programa. Por ejemplo, el agente del JP Morgan en el gobierno, Lewis W Douglass (Director de Presupuesto de EEUU [clan Rockefeller]) forzó el cierre de la Administración de Obras Civiles en 1934, lo que motivó el despido de los 4 millones de trabajadores.

Wall Street hizo todo lo posible por asfixiar la economía americana a toda costa. En 1931, los préstamos de los bancos de Nueva York a la economía real ascendían a $ 38.1 mil millones, que se redujeron a solo $ 20.3 mil millones en 1935. Mientras que los bancos de Nueva York tenían el 29% de sus fondos en bonos y valores estadounidenses en 1929, estos aumentaron al 58%, lo que cercenó la posibilidad de que el gobierno pudiera otorgar crédito al tejido productivo de la economía real.

Cuando, en 1937, el secretario del Tesoro de Roosevelt lo persuadió para que cancelase las obras públicas y ver si la economía “podía sostenerse por sí misma”, Wall Street extrajo crédito de la economía colapsando el índice de producción industrial de un 110 al 85%, borrando siete años de su valor de ganancia, mientras que el acero cayó del 80% de su capacidad de producción a niveles de la Depresión del 19%. Se perdieron 2 millones de puestos de trabajo y el Dow Jones perdió el 39% de su valor. Esta [maniobra orquestada por múltiples entidades] no fue diferente para enterdernos de patear las muletas de un paciente cojo en rehabilitación, y no pasó desapercibido para nadie que aquellos que estaban saboteando el proyecto eran los mismos que apoyaban abiertamente al fascismo en Europa. El patriarca de Bush, Prescott Bush, que entonces representaba a Brown Brothers Harriman, fue declarado culpable de comerciar con el enemigo en 1942 [de alta traición en plana guerra]!

Intento de Golpe de Estado Fascista Frustrado en Estados Unidos

Los banqueros no se limitaron al sabotaje financiero durante ese tiempo, sino que también intentaron un golpe militar fascista en Estados Unidos que fue expuesto por el Comandante General Smedley Butler en su testimonio ante el Congreso del 20 de noviembre de 1934. Butler testificó que el plan se inició en el verano de 1933 organizado por los financieros de Wall Street que intentaron utilizarlo como dictador títere [como hicieron con Hitler o Pinochet] para que comandara a 500 000 miembros de la Legión Americana y asaltar la Casa Blanca [militares veteranos parangonable a los Fasci di Combattimento, ahora llamadas milicias]. Mientras Butler hablaba, esos mismos financistas acababan de establecer una organización anti-New Deal llamada American Liberty League, que luchó para mantener a Estados Unidos fuera de la  guerra [2ªGM] en defensa del gobierno global fascista anglo-nazi con el que deseaban asociarse.

https://www.youtube.com/watch?v=QQoBAc95tnw

La Liga de la Libertad Estadounidense solo cambió la cantinela cuando se hizo evidente que Hitler se había convertido en un desobediente monstruo de Frankenstein que no estaba nada contento con una posición subordinada al ideal británico de Nuevo Orden Mundial [su 'Nuevo Orden' era el viejo III -Reich]. En respuesta a la agenda de la Liga de la Libertad, Roosevelt declaró que “algunos hablan de un Nuevo Orden Mundial, pero no es nuevo y no es orden”.

La Visión Anticolonial de posguerra de Roosevelt

Uno de los mayores testimonios vivos de la visión anticolonial [y por ende antiimperialista] de Roosevelt está contenido en un libro poco conocido de 1946 escrito por su hijo Elliot Roosevelt quien, como confidente y ayudante de su padre, estuvo al tanto de algunas de las reuniones más delicadas en las que su padre participó durante toda la guerra. Viendo cercano el fin de la visión de posguerra tras la muerte de Roosevelt padre el 12 de abril de 1945 y el surgimiento de una presidencia pro Churchill bajo el mandato de Harry Truman, que no perdió tiempo en lanzar las bombas nucleares sobre un derrotado Japón , inició el comienzo de una caza de brujas comunistas en casa [McCartismo] y al lanzó la Guerra Fría en el extranjero, Elliot escribió "As He Saw It" [Como él lo Vió, pdf] (1946) para dejar testimonio vivo del potencial perdido con la muerte de su padre.

Como mencionaba Elliot sobre sus motivos para escribir el libro:

“La decisión de escribir este libro se tomó más recientemente y fue impulsada por acontecimientos urgentes. El discurso de Winston Churchill en Fulton, Missouri, intervino en esta decisión… el creciente arsenal de bombas atómicas estadounidenses es un factor convincente; todos los signos de una creciente desunión entre las principales naciones del mundo, todas las promesas incumplidas, todo el renaciente poder políticas del codicioso y desesperado imperialismo fueron mis espuelas en esta empresa ... Y he visto las promesas mancilladas, y las condiciones arbitraria y cínicamente ignoradas, y las estructuras de la paz traicionadas ... Les escribo esto, entonces, a ustedes que estarán de acuerdo conmigo en que ... el camino que él trazó ha sido alevosa y deliberadamente abandonado ".

Las cuatro libertades

Incluso antes de que Estados Unidos entrara en la guerra, los principios de armonía internacional que FD Roosevelt enunció en su Discurso de las Cuatro Libertades del 6 de enero de 1941 ante el Congreso de los Estados Unidos sirvieron como guía en todas las batallas durante los siguientes 4'5 años. En este discurso, FDR dijo:

“En los días futuros, que buscamos asegurarnos, esperamos un mundo fundado en cuatro libertades humanas esenciales.

“La primera es la Libertad de Expresión y Habla, en todo el mundo.

“La segunda es la Libertad de cada persona para Adorar a Dios a su manera, en todo el mundo.

“La tercera es la libertad de vivir Sin Necesidades, que, traducido en términos mundiales, significa un entendimiento económico que asegurará a cada nación una vida sana en tiempos de paz para sus habitantes, en todo el mundo.

“La cuarta es la libertad Frente al Miedo, que, traducido en términos mundiales, significa una reducción mundial de armamentos hasta tal punto y de una forma tan completa que ninguna nación esté en posición de cometer un acto de agresión física contra ningún vecino, en cualquier lugar del mundo.

“Esa no es una visión de un milenio lejano. Es la base definitiva para un tipo de mundo alcanzable en nuestro tiempo y generación. Ese tipo de mundo es la antítesis misma del llamado Nuevo Orden de tiranía que los dictadores buscan crear con el estallido de una bomba.

“A ese Nuevo Orden, oponemos a la la Gran Concepción: el Orden Moral. Una buena sociedad es la capaz de enfrentarse a los esquemas de dominación mundial e injerencias extranjeras por igual sin miedo.

“Desde el comienzo de la historia estadounidense, hemos estado comprometidos en el cambio, en una revolución pacífica perpetua, una revolución que avanza de manera constante, silenciosa, ajustándose a las condiciones cambiantes, sin el campo de concentración o la cal viva en la zanja. El orden mundial que buscamos es la cooperación entre países libres, trabajando juntos en una sociedad amigable y civilizada.

“Esta nación ha apostado su destino en las manos, cabezas y corazones de millones de hombres y mujeres libres; y su fe en la libertad bajo la guía de Dios. La libertad significa la supremacía de los derechos humanos en todas partes. Nuestro apoyo va a aquellos que luchan por obtener esos derechos o mantenerlos. Nuestra fuerza es nuestra Unidad de Propósito".

Al escuchar estas delineadas Libertades, el pintor estadounidense Norman Rockwell se inspiró para pintar cuatro obras maestras que se exhibieron hoy en todo Estados Unidos y transmitieron la belleza del espíritu de FD Roosevelt a todos los ciudadanos.

El patriótico vicepresidente de FDR (y el hombre que DEBERÍA haber sido presidente en 1948), Henry Wallace, describió la visión de FD Roosevelt en un apasionado discurso en video a la gente en 1942 que debería ser visto por todos los ciudadanos del mundo de hoy:

https://www.youtube.com/watch?v=_p2TQaUf3pQ&feature=emb_title

Churchill vs Roosevelt: El choque de dos paradigmas

El relato de Elliot del choque de paradigmas de 1941-1945 entre su padre y Churchill es invalorable tanto por su capacidad para arrojar luz sobre el verdaderamente noble carácter constitucional de Estados Unidos personificado en la persona de Roosevelt, como también por demostrar el hermoso potencial de un mundo que DEBERÍA HABER SIDO si ciertos eventos antinaturales [desencadenados por Wall Street] que no hubiesen intervenido para hacer descarrilar la evolución natural de nuestra especie hacia una era de cooperación de beneficio mutuo, razón creativa y armonía.

En sulibro 'As He Saw It', Elliot documenta una conversación que tuvo con su padre al inicio de la entrada de Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial, quien le expuso claras sus intenciones anticoloniales diciendo:

"Estoy hablando de otra guerra, Elliott. Estoy hablando de lo que le pasará a nuestro mundo, si después de esta guerra permitimos que millones de personas vuelvan a caer en la misma semiesclavitud! [como le sucedió a Alemania tras el tratado de París]

No pienses ni por un momento, Elliott, que los estadounidenses estarían muriendo en el Pacífico esta noche, si no hubiera sido por la codicia miope de los franceses, los británicos y los holandeses. ¿Les permitiremos que lo hagan de nuevo? ¿otra vez? Tu hijo tendrá aproximadamente la edad de combatir, dentro de quince o veinte años.

“Una frase, Elliott. Después te echo de aquí. Estoy cansado. Ésta es la frase: Cuando hayamos ganado la guerra, trabajaré con todas mis fuerzas para asegurarme de que Estados Unidos no se sienta en la posición de aceptar ningún plan que fomente las ambiciones imperialistas de Francia, o que lo facilite o aliente al Imperio Británico en sus ambiciones imperiales".

Esta pugna llegó a un punto crítico durante un gran enfrentamiento entre Roosevelt y Churchill durante la Conferencia de Casablanca del 24 de enero de 1943 en Marruecos. En este evento, Elliot documenta cómo su padre se confronta primero a la creencia de Churchill en el mantenimiento de los acuerdos comerciales preferenciales del Imperio Británico sobre los cuales se fundó su sistema de saqueo:

"Por supuesto", comentó [FD Roosevelt], con una especie de astuta seguridad, "por supuesto, después de la guerra, una de las condiciones previas de cualquier paz duradera tendrá que ser la mayor libertad de comercio posible".

[...]

"Churchill admitió, en ese momento, que sabía que la paz solo podía lograrse de acuerdo con los preceptos que establecieran los Estados Unidos. Y al decir lo que hizo, estaba reconociendo que la política colonial británica se iría a pique, que los intentos británicos de dominar el comercio mundial se irían apique, y que las ambiciones británicas de enfrentar a la URSS contra los EE UU se irían a pique. O se habrían ido si mi padre hubiera vivido."

Esta historia fue entregada en su totalidad durante una conferencia del 15 de agosto 2020 por el autor:

https://www.youtube.com/watch?v=1IHVkJPfsx8

La visión de post GM de Roosevelt destruida

Si bien la lucha de Roosevelt cambió el curso de la historia, su temprana muerte durante los primeros meses de su cuarto mandato de 1945 resultó en una perversión fascista de su visión de posguerra.

En lugar de ver al FMI, el Banco Mundial o la ONU utilizados como instrumentos para la internacionalización de los principios del New Deal para promover préstamos a largo plazo y a bajo interés para el desarrollo industrial de las antiguas colonias, los aliados de Roosevelt fueron expulsados ​​del poder mientras su cadáver aún estaba caliente, y las instituciones fueron recapturadas por las mismas fuerzas que intentaron conducir al mundo hacia una dictadura bancaria central en 1933.

La Liga de la Libertad Estadounidense engendró varias organizaciones anticomunistas “patrioteras” que se hicieron con el poder, con el FBI y el macartismo a la sombra de la Guerra Fría. Esta es la estructura sobre la que advirtió Eisenhower cuando mencionó a “el Complejo Industrial Militar” en 1960 y contra la que John Kennedy luchó durante sus 900 días como presidente [asesinado por el Deep State en 1963].

Esta es la estructura que busca destruir al presidente Donald Trump y desacreditar las elecciones de Noviembre de este año bajo la forma de un golpe militar y la Guerra Civil por temor a que un nuevo impulso Roosveltiano [¿WTF?  Ningún tipo de relación ni en políticas ni en actitud. Los esfuerzos de un fascista como Trump no pasan del patético MAGA] esté comenzando a revivir en Estados Unidos y se pueda alinear con el emergente New Deal internacional del siglo XXI bajo la forma de la Iniciativa de la Franja y la Ruta China BRI y la Alianza Euroasiática. El ministro de Finanzas francés, Bruno LeMaire, y Marc Carney [ex gobernador del BoE] [defensores ambos de la banca mundial y el NWO] han manifestado su temor de que si Occidente no impone el Green New Deal, la Nueva Ruta de la Seda y el yuan se convertirán en la base del nuevo sistema mundial..

El Green New Deal, ideado por el Banco de Inglaterra, está siendo perpetrado bajo la niebla del Great Green Global Reset del COVID-19, que promete imponer restricciones draconianas a la capacidad de carga de la humanidad en defensa la naturaleza para salvarla de la humanidad, lo que no tiene nada que ver con el New Deal de Franklin Roosevelt.  Y tiene menos aún que ver con los acuerdos de Bretton Woods de 1944. Son simplemente los sueños húmedos de los banqueros centrales para la despoblación y el fascismo "con rostro democrático" que no lograron en sus tentativas de 1923 y 1933 y solo podrán imponerse si la gente permanece ciega a su propia historia reciente.

lunes, 21 de septiembre de 2020

Liberalismo, eufemismo de Capitalismo. Una terrible maldición se cierne sobre la humanidad y el mundo

'Liberal' es el sustantivo usado como eufemismo de 'Capitalismo' y que sirve para enmascarar la palabra 'Explotación'.

Desde que el liberalismo/capitalismo se abrazó a la desigualdad como justificación del acceso preferente a los recursos, desde que el liberalismo justifica la desigualdad, se desligó de cualquier atisbo de lo que podría considerarse libertar para convertirse en Inequidad y exclusión. No hay libertad en la explotación del hombre. No hay libertad en la explotación de la naturaleza. Solo muerte y privilegio. El liberalismo es la inequidad, solo una bella máscara literaria de una terrible maldición que cae sobre la humanidad y el mundo.

Liberalismo es explotación, parasitismo, constricción, represión, inequidad, predación como estamos viendo. Capitalismo.

Muerte a los Liberales, Muerte a los Capitalistas.

domingo, 20 de septiembre de 2020

La expansión del capitalismo está destruyendo el planeta y la humanidad: La renovación del ideal socialista

El planeta no se autodestruye, lo estamos destruyendo. En conjunto estas fuerzas destructoras son fuerzas constructoras para nosotras como especie,. Lo cual plantea un dilema, o continuamos hasta destruir el mundo que conocemos o cambiamos la forma de producción y dejamos de ser lo que somos. Los intereses creados prácticamente impiden la segunda opción, por lo que la suerte está echada. No obstante llegará un punto en el que los intereses creados y las necesidades se enfrenten. Este preclaro artículo arroja luces de cómo serán las condiciones en las que se de esta pugna. Hay esperanza porque la necesidad ha superado el interés. Ahora si que no hay otra alternativa.

Uno de los principales problemas de la fase intermedia del socialismo es que al ser propietario el estado de tierras y recursos permite la explotación. Es decir, la extracción de un beneficio a partir de un capital en vez de la producción para el consumo. Puede parecer un matiz vano pero la conceptualización de la producción y uso es diametralemnte contrario. Sin tiempo en el horizonte este paso intermedio puede ser la causa del fracaso del proyecto en si, cuyo primer objetivo es la simple supervivencia. La igualdad y la equidad debe llegar al medio ambiente.

Salud! PHkl/tctca
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Fuente - Bellamy Foster: La renovación del ideal socialista 13.9.2020 vía La Haine


En un mundo acorralado por el capitalismo de catástrofe cualquier análisis serio que se proponga la renovación del socialismo debe comenzar con comprender la necesidad de una "destrucción creativa" de las bases materiales del capital en toda la existencia social. (1)

El capitalismo actualmente existente - de carácter catastrófico - se manifiesta materialmente en la convergencia de tres factores: crisis ecológica planetaria, crisis epidemiológica global y crisis económica permanente. (2)

A todas estas crisis hay que sumar los siguientes elementos: extensión mundial de explotación imperialista (mediante la cadena global de productos básicos); desaparición del estado democrático liberal con la imposición de políticas neoliberales y el surgimiento del neofascismo; y una nueva era de inestabilidad hegemónica, que llega acompañada del peligro de una guerra interminables.(3)

Crisis Climática

El consenso científico mundial denomina la crisis climática como "una situación sin retorno», esto significa que si las emisiones de carbono - producto de la quema de combustibles fósiles- no llegan a cero en las próximas décadas, la existencia de la civilización industrial estará seriamente amenazada y, en última instancia, también la supervivencia de los seres humanos. (4)

Sin embargo, la crisis existencial de nuestra especie no se limita al cambio climático, también se extiende una brecha ecológica global de los siguientes fenómenos planetarios: acidificación de los océanos; extinción de especies (y la consiguiente pérdida de diversidad genética); destrucción de ecosistemas forestales; disminución del agua dulce; interrupción de los ciclos de nitrógeno y fósforo; rápida propagación de agentes tóxicos (incluidos los radio-nucleidos); y, proliferación incontrolada de organismos modificados genéticamente. (5)

La ruptura de estas fronteras ecológicas está intrínsecamente ligada a un sistema económico basado en la acumulación del capital, que por su propia dinámica no reconoce barreras insalvables para un crecimiento ilimitado y exponencial. Por tanto, no hay salida de la actual destrucción de las condiciones sociales y naturales de la existencia que no requieran un salir radical del capitalismo.

Lo primordial para nuestra época es la creación de lo que István Mészáros llamó un nuevo sistema de reproducción social metabólica. (6) Esta propuesta nos habla de la necesidad de construir un nuevo modelo de socialismo para el siglo XXI, pensado de tal manera, que desafíe críticamente la teoría y la práctica las experiencias socialistas del pasado siglo XX.

Polarización de la lucha de clases

En los EEUU, al igual que en otros países, sectores del capital financiero monopolista han logrado reclutar a elementos de la clase media baja, (principalmente blanca) utilizando una ideología nacionalista, racista y misógina. El resultado ha sido una política neofascista, que reúne en un sólo constructo ideológico; una larga historia de racismo estructural (legado de la esclavitud); diversas forma de colonialismo; y el militarismo propio del imperialismo.

Sobre estas prácticas políticas reaccionarias se edificó el ascenso al gobierno de Donald Trump, un magnate multimillonario transformado en el líder de una derecha radical que tiene como objetivo la imposición de un nuevo régimen capitalista autoritario.

Aunque hoy esté cuidadosamente ofuscada, por una campaña electoral, la alianza de los neofascista con los neoliberales es un proceso político fácilmente comprobable. (7) Tanto es así, que si llegará a triunfar en las elecciones Joe Biden, la alianza neoliberal-neofascista se mantendrá sin grandes cambios. La razón es simple: esta asociación es el pedestal sobre el cual se erige el poder estatal del capital monopolista-financiero en EEUU. (8)

Simultáneamente, a la constitución de esta nueva formación política reaccionaria en el "corazón del imperio" se está desarrollando un importante movimiento por el socialismo, asentado en la clase obrera, la juventud y los intelectuales disidentes.

Con la desaparición de la hegemonía estadounidense dentro de la economía mundial - acelerada por la globalización de la producción - se minó el poder de la antigua aristocracia obrera de base imperial. Este proceso ha originado el resurgimiento de los ideales del socialismo entre parte importante de la clase trabajadora.(9)

La Gran Desigualdad, un concepto acuñado por Michael D. Yates, expresa con claridad la situación que están viviendo los sectores populares estadounidenses, el sentimiento de incertidumbre y de ausencia de futuro - que afecta especialmente a la juventud- de hecho ha provocado un aumento dramático de «muertes por desesperación», según los datos oficiales. (10)

En resumen, amplias capas de la población están cada vez más enfurecidas por un sistema capitalista que no ofrece perspectivas y como consecuencia ven al socialismo como una alternativa totalmente legítima.(11)

Este nuevo escenario no ocurre sólo en EEUU. En otras países del mundo hay fuerzas objetivas con características similares, especialmente en el Sur Global, que soporta una estancamiento permanente, la financiarización de la economía y una brutal destrucción ecológica.

Al parecer las fuerzas que luchan por el socialismo seguirán creciendo como efecto de la crisis estructural del capital y la polarización de la lucha de clases. Entonces, creo que hay por lo menos dos preguntas que debemos tratar de responder: ¿Qué tipo de socialismo queremos? ¿En qué debe diferenciarse el socialismo del siglo XXI del socialismo del siglo XX?

¿Socialismo en EEUU?

Gran parte de lo que se conoce como socialismo en los EEUU - y en otros países de occidente - es la variante socialdemócrata que invariablemente se ha sumado a las políticas liberales de "izquierda" para mantener una economía subordinada al orden existente. En un vano intento los socialdemócratas han pretendido por décadas hacer que el capitalismo funcione "mejor" a través de mecanismos de regulación. Ahora nuevamente siguen esta antigua fórmula...y lo hacen justo cuando los liberales dejan atrás parte de sus postulados y apuntalan su alianza con el neofascismo contemporáneo. (12)

En el actual contexto histórico las coaliciones social-liberales están destinados a fracasar. De entrada, los partidos que practiquen estas políticas inevitablemente traicionarán las esperanzas de los pueblos que los encumbró al poder con la "democracia electoral".

Mientras esta rutina se repite, el mundo está asistiendo al crecimiento de un socialismo genuino, articulado básicamente en la lucha extra-electoral y en las grandes manifestaciones de masas que van más allá de los parámetros del sistema.

Los levantamientos populares en EEUU - prácticamente desconocidos desde la Guerra Civil - expresan cabalmente el malestar general de la sociedad. Con la participación de la clase trabajadora, de la juventud blanca y en medio de la pandemia (y de una depresión económica concomitante) las demostraciones de protesta ya han cruzado la línea "del color". (13).

Pero, aunque el movimiento por el socialismo, se haya instalado en en el «corazón bárbaro» del sistema - como resultado de fuerzas objetivas - el proyecto socialista carece aún de una base subjetiva adecuada. (14)

Un obstáculo importante en la formulación de los objetivos estratégicos del socialismo tiene que ver con el abandono de los ideales socialistas/comunistas de pensadores como Karl Marx.

Para comprender este problema, es necesario ir más allá de los recientes intentos de la izquierda por abordar el significado del comunismo sobre una base filosófica; una cuestión que ha llevado a tratamientos abstractos de la idea comunista en la última década por Alain Badiou y otros ( por ejemplo en La hipótesis comunista y El horizonte comunista). (15)

Más bien, es necesario un punto de partida histórico más concreto, que recupere la teoría de las "dos fases del desarrollo socialista / comunista" que expone Marx en la "Crítica del programa de Gotha" y Lenin en "El Estado y la Revolución".

Un artículo de Paul M. Sweezy ya planteó esta necesidad teórica en "El comunismo como ideal", un trabajo publicado octubre de 1963.(16)

El comunismo de Marx como ideal socialista

En la "Crítica del Programa de Gotha"- escrita en oposición al economicismo de la socialdemocracia alemana de Ferdinand Lasalle - Marx distinguió dos "fases" históricas en la lucha por crear una sociedad de productores asociados (comunismo).

La primera fase definida como «la dictadura revolucionaria del proletariado», tomaba en cuenta las enseñanzas de la traumática experiencia de la Comuna de París y daba forma a una democracia obrera, que todavía según Marx «tiene los defectos propios de la sociedad de clases capitalista".

En esta fase inicial, expone el filósofo alemán, se debe producir una ruptura con la propiedad privada capitalista y una transformación de la estructura política del estado capitalista.(17) Como medida provisoria de la transición al socialismo, en esta etapa, la producción y la distribución toman inevitablemente la forma de "cada uno según su trabajo". Esta imperativo económico hará perdurar durante un tiempo las condiciones de desigualdad del capitalismo.

Por el contrario, en la fase posterior, el principio que debe regir pasa "de cada uno según su capacidad, a cada uno según su necesidad" eliminando, entre otras cosas, el sistema salarial tal como lo conocemos. (18)

Del mismo modo, mientras que la fase inicial del socialismo/ comunismo se requiere la formación de una nueva estructura estatal en la fase superior el objetivo será la extinción del estado, como aparato que está por encima y en relación antagónica con la sociedad.

En el comunismo el Estado habrá de ser reemplazado por una forma de organización política que Engels llamó "Comunidad", porque esta forma política de gobierno debe estar asociada directamente con una modelo de producción de base comunitaria. (19)

Para Marx en la fase superior - junto con el control democrático y colectivo de la propiedad- las células constitutivas de la sociedad deben estar organizadas sobre una base comunal y el conjunto de la producción debe estar en manos de productores asociados libremente.

En el comunismo, afirma, el trabajo se habrá convertido no sólo en un «medio de vida» y la actividad productiva estará destinada a crear bienes que sean "valores de uso y no sólo valores de cambio". Será una sociedad en la que "el libre desarrollo de cada uno será la condición para el libre desarrollo de todos". (20)

La abolición de la sociedad capitalista y la creación de una sociedad de productores asociados habrá de conducir al fin de la explotación de clases, la eliminación de las divisiones entre trabajo intelectual y manual y entre la ciudad y el campo. Y deberá superar definitivamente la familia patriarcal que engendra la esclavitud de la mujer. (21)

Cuando Marx escribe sobre las condiciones materiales de la nueva sociedad está pensando en un nuevo metabolismo social de la humanidad y de la tierra: "La libertad, en esta esfera, consiste en que el hombre socializado, los productores asociados, gobiernen el metabolismo humano con la naturaleza de manera racional actuando con el menor gasto de energía posible" (22).

En "El Estado y la Revolución", Lenin - reafirmando los argumentos de Marx- describe la primera y segunda fase del comunismo como » una distinción científica entre dos fases del mismo proceso. Lo que Marx habitualmente llama socialismo es la primera fase de la sociedad comunista".(23)

Pese que Lenin compartía el análisis de Marx, el ulterior marxismo oficial se volvió rígido y creó dos etapas completamente separadas, colocando la llamada etapa comunista tan apartada de la etapa socialista que está fase se convirtió en una lejana utopía.

Partiendo de una concepción rígida y del principio de reparto "según el trabajo de cada uno", José Stalin llevó a cabo una guerra ideológica contra la idea de la igualdad sustantiva, definiéndola como un «absurdo reaccionario, pequeñoburgués, digno de una secta primitiva de ascetas, pero no de una sociedad socialista organizada". Esta misma postura iba a persistir, de una forma u otra, hasta la desaparición de la Unión Soviética con Mijaíl Gorbachov. (24)

Precisamente analizando el proceso de transición socialista /comunista en "El imperativo socialista" Michael Lebowitz argumentó:

"En lugar de una lucha continua para ir más allá de lo que Marx llamó los "defectos heredados de la sociedad capitalista", la interpretación estándar del marxismo oficial (desde finales de la década de 1930 hasta finales de la década de 1980) introdujo una división de la sociedad post-capitalista en dos 'etapas' distintas, determinadas económicamente por el nivel de desarrollo de las fuerzas productivas.

Los cambios fundamentales en las relaciones sociales destacados por Marx como la esencia misma del camino socialista fueron abandonados por un proceso de adaptación a los defectos heredados de la sociedad capitalista. Se olvido que Marx había reclamado un proyecto destinado a construir una comunidad de productores asociados desde el principio, como parte de un proceso continuo - aunque necesariamente desigual - de la construcción socialista". (25)

El abandono del ideal socialista asociado con la fase superior del comunismo divulgado por Marx se envolvió en un complejo asunto sostenido por las cambiantes condiciones histórico del momento. Y, finalmente - una vez que el nuevo sistema dejó de ser revolucionario - la transición se empantanó. El resultado fue la formación de una nueva clase social (nomenclatura) que abandonó la idea del socialismo provocando la desaparición de las sociedades de tipo soviético.

Según Paul Sweezy, «la propiedad estatal y la planificación no son suficientes para definir un socialismo viable e inmune al retroceso, un socialismo que sea capaz de avanzar a la segunda etapa, hacia el comunismo necesitaba algo más: una lucha continua por crear una sociedad de iguales".(26)

Para Marx, el movimiento hacia una sociedad de productores asociados era la esencia misma del camino socialista hacia la «sociedad comunista». (27) Pero, desde que el socialismo se estableció en términos más restrictivos la sociedad posrevolucionaria perdió la conexión vital con la lucha dual por la libertad y la necesidad, y por tanto se desconectó con los objetivos a largo plazo del socialismo, con su verdadero significado y su coherencia.

Es evidente que debemos tomar como base esta experiencia para construir el socialismo en el nuevo siglo. Esto significa atender con precisión aquellos aspectos del ideal socialista / comunista (con una teoría y una práctica suficientemente radical) como para abordar las necesidades urgentes del presente, sin perder de vista las necesidades del futuro.

Si algo nos ha enseñado la crisis ecológica planetaria es que se requiere un nuevo metabolismo social con la tierra, una sociedad de igualdad sustantiva y ecológicamente sostenible (28). (Algunos de los logros de la ecología cubana van precisamente en ese camino según Mauricio Betancourt)

Georg Lukács llamó a la lucha por la sostenibilidad ecológica y la igualdad sustantiva una "necesaria doble transformación"; de las relaciones sociales entre nosotros y de las relaciones humanas con la naturaleza. (29).

Cualquier proyecto emancipatorio debe pasar necesariamente por varias fases revolucionarias, que no se pueden predecirse de antemano. Sin embargo, para tener éxito, una revolución debe buscar hacerse irreversible mediante la promoción de un sistema orgánico dirigido a satisfacer las necesidades humanas sin dejar lado lucha por la igualdad sustantiva y asegurando una efectiva regulación del metabolismo humano con la naturaleza.(30)

La libertad como necesidad

Al igual que pensaba Hegel, Federico Engels sostiene en el Anti-Dühring que la verdadera libertad está fundada en el reconocimiento de la necesidad. El cambio revolucionario es el punto en que la libertad y la necesidad se encuentran en la praxis concreta.

Aunque existe algo así como una necesidad ciega, una vez que se conocen las fuerzas objetivas que mueven la sociedad, la necesidad deja de ser ciega y ofrece el caminos para la acción revolucionaria y la libertad humana. La necesidad y la libertad se sostienen mutuamente en los períodos de cambio social. (31)

Para ilustrar este principio materialista dialéctico, Lenin escribió: " No conocemos la necesidad de la naturaleza que produce por ejemplo los fenómenos meteorológicos. Pero aunque no conocemos esa necesidad, sabemos que existe. Lo que sí sabemos con certeza es que la relación humana con el clima y la naturaleza ha cambiado históricamente de acuerdo con las relaciones productivas que gobiernan nuestras acciones" (32).

Hoy en día, el conocimiento de la crisis climática antropogénica y de los fenómenos meteorológicos está sacando a los seres humanos del reino de la necesidad ciega y exigen que la población mundial participe conscientemente en una lucha por la libertad y la supervivencia humana, es decir contra un capitalismo que se ha tornado destructivo y catastrófico.

Al respecto - y en el contexto de una severa ruptura metabólica impuesta a Irlanda por el colonialismo británico en el siglo XIX - Marx escribió: "la crisis ecológica se presenta al pueblo de Irlanda como una cuestión de ruina o revolución«.(33)

En esta era del Antropoceno, la brecha ecológica resultante de la expansión de la economía capitalista está destruyendo el proceso natural de los ciclos biogeoquímicos en todo el mundo. El conocimiento de este proceso objetivo nos apremia a cambiar radicalmente la reproducción metabólica social de la humanidad y del planeta.

Visto en estos términos, la concepción de Marx de una "comunidad de productores asociados" no es una concepción utópica o un ideal abstracto, sino es una posición esencial para la defensa de la humanidad del presente y del futuro. Una sociedad de este tipo - comunista- es una necesidad ineludible para que la humanidad mantenga una relación sostenible con el planeta-tierra. (34)

Un sujeto que puede ser revolucionario

Pero, ¿dónde está el agente del cambio revolucionario para lograrlo? La respuesta es esta: Pienso que estamos asistiendo al surgimiento de las precondiciones materiales de lo que podríamos llamar un proletariado ambiental global.

Poco después de los llamados disturbios Plug Plot (y en el apogeo del Cartismo radical) Federico Engels retrató las condiciones del trabajo en fábricas, el deterioro ambiental, el estado de la vivienda, del suministro de agua, la falta de alimentación y de nutrición infantil. En "La situación de la clase trabajadora en Inglaterra"(1845) el compañero de Marx describió el entorno epidemiológico propio del capitalismo de la época. Engels lo llamó "asesinato social" porque el sistema fabril trajo consigo enfermedades contagiosas que provocaron una gran mortalidad entre la clase proletaria. (35)

Bajo la influencia directa de Engels (y también por sus propios estudios epidemiológicos) mientras escribía El Capital, Marx utilizó el término brecha metabólica para explicar la degradación del suelo y las "epidemias periódicas" inducidas por el desarrollo de la economía capitalista. (36)

Los análisis de Marx y Engels demostraron que la lucha de clases y los procesos revolucionarios son también consecuencia de las deterioradas condiciones ambientales en el que sobrevive la población trabajadora (esto aconteció en la revolución rusa y china y, sucede en los presentes levantamientos en el Sur Global).

Hoy, la persistencia de la epidemia de la COVID 19, nos hace pensar que es probable que se produzcan nuevas situaciones revolucionarias. La combinación de las crisis económicas y ecológicas pueden crear escenarios favorables para la transformación social, siempre y cuando los movimientos sociales trabajen para hacer posible un cambio radical.

En este sentido, visto desde un punto de vista global, la cuestión del proletariado ambiental se superpone y es parte de las rebeliones del campesinado ecológico y de los combates de los pueblos originarios.(37) En el actual período de lucha ecológico-epidemiológica y lo que llamamos proletariado ambiental puede llegar a ser una fuerza importante.

La terrible realidad impuesta por el imperialismo en la era del Antropoceno probablemente hará que la acción ecológica revolucionaria tenga un lugar destacado en el Sur Global. (38)

De hecho "la tríada ( EEUU, Europa y Japón) hace decenios que está usufructuando de la biocapacidad del planeta en un rango superior en cuatro veces al promedio del resto de los países del mundo". (Samir Amin en "Modern Imperialism, Monopoly Finance Capital, and Marx's Law of Value ")

Dicho de otra manera, el nivel insostenible de consumo del Norte global sólo es viable porque una buena parte de la biocapacidad del Sur está siendo transferida mediante beneficios a los centros capitalistas de la tríada.

El desenlace de la permanente e irracional expansión capitalista puede llegar a tener un resultado catastrófico: la extinción de parte de los pueblos del Sur como resultado de la pobreza y de epidemias recurrentes. Sin embargo y mostrando la verdadera cara de los poderosos, en el centro del capitalismo mundial se desarrolla una hipócrita justificación, es una ideología eco-fascista que pretende dar legitimidad a una "solución final" a la "superpoblación". (39)

Basta con mirar nuestra realidad. Los hechos están a la vista: la actual expansión del capitalismo está destruyendo el planeta y la humanidad.

Un nuevo sistema de reproducción metabólica social

Poco después de la Revolución Francesa, Immanuel Kant expuso el punto de vista liberal: "la igualdad de los hombres como sujetos coexiste con la desigualdad en las posesiones materiales... Por esto la igualdad de los hombres puede convivir sin dificultades con la desigualdad de derechos específicos". (41)

Para los liberales la igualdad es un derecho meramente formal, "existe solo en el papel" apostilló Engels. No sólo en lo que respecta "al contrato de trabajo entre capitalista y trabajador sino también en el contrato matrimonial". (42) Para Marx la sociedad capitalista estableció el «derecho a la desigualdad, que es el único derecho efectivo para los proletarios». (43)

Para Mészáros, la lucha por una una democracia y un igualdad sustantiva es la lucha por una sociedad de iguales. (40) Este enfoque no sólo enfrenta al capital en su "corazón bárbaro", sino que también se opone a cualquier intento inútil de detenerse a mitad de camino en la transición al socialismo/comunismo.

La igualdad sustantiva, es un aspecto incuestionable de la noción del comunismo de Marx, Esta concepción requiere un cambio en las células constitutivas de la sociedad: la nueva organización social que no puede estar fundada por el capital y reforzada por un estado jerárquico, al contrario debe sustentarse en la organización de productores asociados libres y en un estado comunal.

Un proceso revolucionario de construcción socialista - entendido como un nuevo sistema de reproducción social - no puede tener éxito sin un "principio orientador" como parte de una estrategia a largo plazo. La planificación socialista y una genuina democracia sólo serán una verdad tangible con la constitución de un poder real en la base misma de la sociedad. Sólo así las revoluciones se vuelven irreversibles.

Al reconocer explícitamente la necesidad de un socialismo para el siglo XXI la Revolución Venezolana y Hugo Chávez dio un importante paso y se convirtió inmediatamente en una amenaza al orden imperante.

Para Chávez el socialismo del siglo XXI (44) suponía una lucha continua por la igualdad sustantiva y era necesario abolir todas las desigualdades y opresiones (de color, de género, etc) de la sociedad capitalista.

Paul Sweezy subrayó algunos aspectos que deben caracterizar la nueva formación social de los iguales.

"Surgirán necesariamente nuevas formas de trabajo en una nueva sociedad que use la productividad humana de manera más racional. Muchas categorías serán eliminadas por completo (la minería del carbón y el servicio doméstico, por ejemplo) y, en la medida de lo posible, todos los trabajos deben volverse interesantes y creativos.

La reducción del enorme desperdicio y destrucción inherente a la producción y al consumo capitalista deberían abrir un espacio para el empleo del tiempo disponible en forma más creativa".

En una sociedad de iguales, en la que todos están en la misma relación con los medios de producción y tengan la misma obligación de trabajar y servir al bienestar común, todas las «necesidades» que enfatizan la superioridad de unos pocos (e implican la sumisión de los demás) simplemente desaparecerán y serán reemplazados por las necesidades de seres humanos liberados, que viven juntos en el respeto mutuo y la cooperación...

La sociedad y los seres humanos que la componen constituyen un todo dialéctico: ninguno puede cambiar sin cambiar al otro. Y el comunismo como ideal comprende una nueva sociedad y un nuevo ser humano". (45)

Más que un ideal, el comunismo es un principio organizador en el que la igualdad y la democracia sustantiva son lo más importante en el socialismo / comunismo.

Distopía capitalista

Pese a las novelas distópicas, es imposible imaginar el nivel de catástrofe ambiental que enfrentarán los pueblos del mundo si no se detiene la destrucción del metabolismo social y de la tierra por parte del capitalismo.

Según la Academia Nacional de Ciencias de EEUU, "las tendencias existentes proyectan que unos 3.500 millones de personas vivirán en medio de un calor insoportable en condiciones sólo comparables a las del desierto del Sahara para el año 2070 " (46).

Estas proyecciones se han quedado chicas y no logran captar el enorme nivel de destrucción que caerá sobre la mayoría de la humanidad bajo las prácticas sociales propios del capitalismo. La única respuesta será dejar esa "casa en llamas» y empezar a construir otra, desde ahora. (47)

En nuestro siglo el movimiento socialista no sólo es esencial para crear un un futuro mejor, también es una actividad imprescindible para una defensa activa de la población mundial que está enfrentada a la cuestión de la supervivencia.

Internacional de Trabajadores y Pueblos

Hoy, un número incalculable de gente está involucrada en el combate contra el gigante capitalista en el ámbito local y nacional. Sin embargo, una vez más, estas luchas dependen de una coordinación a nivel global. Por tanto para avanzar es necesario crear de una nueva organización internacional de los trabajadores y de los pueblos. (48).

La Internacional para el siglo XXI no puede consistir simplemente en un grupo de intelectuales comprometidos en debates como las del Foro Social Mundial o, en la promoción de tímidas reformas regulatorias como lo hace la Internacional Socialdemócrata o la recientemente creada Internacional Progresista.

Más bien, debe constituirse una organización de los trabajadores y de los pueblos - fundada desde el principio en una fuerte alianza Sur-Sur- para colocar la lucha contra el imperialismo en el centro de la rebelión contra el capitalismo, tal como la consideraron figuras como Chávez y Samir Amin.

En 2011, justo antes de su enfermedad y fallecimiento, Hugo Chávez preparaba el lanzamiento de lo que llamó Nueva Internacional (no una Quinta Internacional.) Su propósito era extender la Alianza Bolivariana a nivel mundial.(49)

Mientras tanto Samir Amin, desde el Foro Mundial de Alternativas había contemplado la organización de una Quinta Internacional, pero en julio de 2018 (sólo un mes antes de su muerte) transformó este proyecto en el llamamiento a crear una Internacional de los Trabajadores y los Pueblos. Al hacer esto Amin reconocía explícitamente que una Internacional puramente obrera resulta hoy insuficiente para enfrentar al imperialismo. (50)

La Internacional pensada por Samir Amin deberá construir de una alianza de los pueblos del mundo que incluya no sólo de los "representantes del proletariado industrial" sino (y de manera muy amplia) al precariado, a los asalariados de los servicios, a los campesinos, y a todos los sectores sociales oprimidos por el capitalismo moderno. Además, deberá ser una organización (no sólo un movimiento) fundado en el respeto a la diversidad, garantizando la independencia real de partidos, sindicatos y organizaciones populares.

La creación de una Nueva Internacional, por supuesto, no puede emerger en medio del vacío, sino que debe articularse dentro y como producto de organizaciones de base, en conjunto con los movimientos anticapitalistas y antipatriarcales.

En opinión de Samir Amin, los elementos cruciales para la lucha antiimperialista son los movimientos de base, los países y partidos que se propongan la desvinculación con el sistema capitalista global y la alianza entre países víctimas de la explotación neocolonial. Hoy estas fuerzas deben unirse al creciente movimiento ecológico global. La lucha universal contra el capitalismo y el imperialismo, insistió, debe caracterizarse por la audacia para romper las coordenadas en los puntos débiles del sistema

Para Amin el mundo seguirá gobernado por un sistema caótico que destruirán el planeta sino no somos capaces de construir un proyecto de transformación revolucionaria de la sociedad. (51)

Vivimos, hoy, una época de coincidencia de la lucha por la libertad y la necesidad. La elección que tenemos ante nosotros es inevitable: ruina o revolución.

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* Este artículo es una versión revisada de una video-charla presentada el 12 de julio de 2020 en la sesión de clausura del Séptimo Foro Sur-Sur sobre Sostenibilidad, Cambio Climático, Crisis Globales y Regeneración Comunitaria. La Conferencia fue organizada por la Universidad Lingnan de Hong Kong.

Notas
1- Karl Marx, Capital, vol. 1 (Londres: Penguin, 1976), 799. El capitalismo de catástrofe en este sentido es distinto del capitalismo de desastre de Naomi Klein. Naomi Klein, The Shock Doctrine: The Rise of Disaster Capitalism(Nueva York: Henry Holt, 2007). La noción de Klein se centra en cómo el neoliberalismo como proyecto político-económico del capital ha buscado explotar sistemáticamente desastres de todo tipo, muchos de ellos producidos por el propio capital, para imponer como solución una "doctrina de choque", diseñada para incrementar aún más el poder del capital. La noción de capitalismo de catástrofe empleada aquí se refiere más bien al crecimiento acumulativo del potencial de catástrofe como una característica inherente de un modo de producción que coloca la acumulación de capital antes que todos los demás fines sociales (y ecológicos), con el resultado de que la tendencia a la catástrofe se universaliza. Véase John Bellamy Foster, «El capitalismo y la acumulación de catástrofes «, Monthly Review 63, no. 7 (Diciembre de 2011): 1-17.

2- Para descripciones concretas de estas catástrofes inminentes convergentes, consulte John Bellamy Foster y Robert W. McChesney, The Endless Crisis (Nueva York: Monthly Review Press, 2012); John Bellamy Foster y Brett Clark, The Robbery of Nature (Nueva York: Monthly Review Press, 2020): 238-87; John Bellamy Foster e Intan Suwandi, " COVID-19 y el capitalismo catastrófico ", Monthly Review 72, no. 2 (junio de 2020): 1-20; y Mike Davis, The Monster Enters (Nueva York: OR, 2020).
3- Samir Amin, Empire of Chaos (Nueva York: Monthly Review Press, 1992).
4- Véase Ian Angus, Facing the Anthropocene (Nueva York: Monthly Review Press, 2016), 25: James Hansen, Storms of My Grandchildren (Nueva York: Bloomsbury, 2009). Incluso esforzarse por lograr cero emisiones netas para 2050, aunque se incorporó a los Acuerdos de París, no es suficiente y se basa en suposiciones poco realistas sobre tecnologías que hoy no existen a gran escala y que quizás nunca sean factibles. La realidad es que el presupuesto de carbono determinado por las posibles emisiones restantes (si bien tiene un 67 por ciento de posibilidades de mantener la temperatura media global por debajo de 1,5 ° C) se agotará en condiciones normales en tan solo ocho años. Véase Greta Thunberg, Discurso en el Foro de Economía Mundial, Davos, 21 de enero de 2020.
5- Johan Rockström et al., "Un espacio operativo seguro para la humanidad", Nature 461, no. 24 (2009): 472-75; William Steffen et al., «Límites planetarios», Science 347, no. 6223 (2015): 745-46; Michael Friedman, " OGM: la distorsión de los procesos biológicos por parte del capitalismo ", Monthly Review 66, no. 10 (marzo de 2015): 19-34.
6- István Mészáros, Beyond Capital (Nueva York: Monthly Review Press, 1995), 39-71.
7- Karl Marx, Capital, vol. 3 (Londres: Penguin, 1981), 362.
8- Véase John Bellamy Foster, Trump in the White House (Nueva York: Monthly Review Press, 2017).
9- Fue Engels quien argumentó por primera vez en un artículo de 1885 para Commonweal editado por William Morris (un análisis que luego se incorporó al prefacio de la edición en inglés de 1892 de The Condition of the Working Class in England ) que el desarrollo de una política socialista El movimiento obrero fue posible en Gran Bretaña por primera vez a mediados de la década de 1880 por el declive de la aristocracia del trabajo (formada principalmente por hombres adultos y excluyendo a mujeres, niños y grupos de inmigrantes) provocada por la decadencia de la hegemonía imperial británica. Karl Marx y Frederick Engels, Obras completas, vol 26 (Nueva York: International Publishers, 1975), 295-301. El famoso análisis de Lenin sobre la aristocracia obrera se basó en este tratamiento de Engels. Véase también Martin Nicolaus, " La teoría de la aristocracia laboral ", Monthly Review 21, no. 11 (Abril de 1970): 91-101; Eric Hobsbawm, " Lenin y la 'aristocracia del trabajo '", Monthly Review 21, no. 11 (Abril de 1970): 47-56.
10- Anne Case y Angus Deaton, Deaths of Despair and the Future of Capitalism (Princeton: Princeton University Press, 2020).
11- Michael D. Yates, " La gran desigualdad ", Revista mensual 63, no. 10 (marzo de 2012): 1-18.
12 - En su El Manifiesto Socialista, Bhaskar Sunkara ofrece una imagen de Marx, divorciada de la Crítica del Programa de Gotha, según la cual Marx y Engels vislumbraron un futuro en El Manifiesto Comunista y en otros lugares en los que "un estado democrático radicalmente transformado que antes era privado propiedad y la usó racionalmente bajo la dirección y en beneficio de la gente «. Más que un intento de una descripción precisa de los puntos de vista de Marx, tal análisis está destinado simplemente a apuntalar su propia versión de la «socialdemocracia de lucha de clases». Bhaskar Sunkara, The Socialist Manifesto (Nueva York: Basic, 2019), 48, 216-17.
13 - Consulte "Notas de los editores ", Revista mensual 72, no. 3 (julio-agosto de 2020).
14 - Curtis White, El corazón bárbaro (Sausalito: PoliPoint, 2009).
15 - Alain Badiou, "La hipótesis comunista", New Left Review 49 (2008): 29-42; Alain Badiou, «La idea del comunismo», en La idea del comunismo, ed. Costas Douzinas y Slavoj ?i?ek (Londres: Verso, 2010): 1-14; Alain Badiou, The Communist Hypothesis (Londres: Verso, 2015); Jodi Dean, The Communist Horizon (Londres: Verso, 2018).
16 - Paul M. Sweezy, "El comunismo como ideal ", Revista mensual 15, no. 6 (Octubre de 1963): 329-40.
17 - Karl Marx, Critique of the Gotha Program (Nueva York: International Publishers, 1938), 9-10, 18. Marx utilizó aquí la terminología de «la primera fase de la sociedad comunista» y «la fase superior de la sociedad comunista». Esta edición de la Crítica del programa de Gotha incluye correspondencia y notas sobre el tema de Marx, Engels y Lenin, y pasajes de El estado y la revolución de Lenin. Sobre la Comuna de París, véase Karl Marx y Friedrich Engels, Writings on the Paris Commune, ed. Hal Draper (Nueva York: Monthly Review Press, 1971); Badiou, La hipótesis comunista, 127-71.

18 - Marx, Crítica del programa de Gotha, 6-10, 14; Karl Marx, "Value, Price, and Profit", en Wage Labor and Capital / Value, Price and Profit (Nueva York: International Publishers, 1935), 62.
19 - Marx, Crítica del programa de Gotha, 10, 17 (Marx), 31 (Engels), 47-56 (Lenin); Marx y Engels, Obras completas, vol. 25, 247, 267-68. Para conocer el significado duradero del concepto de la extinción del estado, véase Mészáros, Beyond Capital, 460-95; Henri Lefebvre, The Explosion (Nueva York: Monthly Review Press, 1969), 127-28.

20 - Marx, Crítica del programa de Gotha, 10; Sweezy, «El comunismo como ideal», 337-38.
21 - Karl Marx y Frederick Engels, The Communist Manifesto (Nueva York: Monthly Review Press, 1964), 34-35, 41.
22 - Marx, Capital, vol. 3, 959.
23 - I. Lenin, Obras seleccionadas: Edición de un volumen (Nueva York: International Publishers, 1976), 334.
24 - Isaac Deutscher, Stalin: A Political Biography (Oxford: Oxford University Press, 1967), 338; Sweezy, en Paul M. Sweezy y Charles Bettelheim, On the Transition to Socialism (Nueva York: Monthly Review Press, 1971), 127.
25 - Michael Lebowitz, The Socialist Imperative (Nueva York: Monthly Review Press, 2015). 71; Karl Marx, Grundrisse (Londres: Penguin, 1973), 171-72. Véase también Peter Hudis, Marx's Concept of the Alternative to Capitalism (Boston: Brill, 2012), 190.
26 - Sweezy, en Sweezy y Bettelheim, On the Transition to Socialism, 131.
27 - Marx y Engels, Obras completas, vol. 5, 52.
28 - Mauricio Betancourt, "El efecto de la agroecología cubana en la mitigación de la brecha metabólica: un enfoque cuantitativo de la producción de alimentos en América Latina", Global Environmental Change 63 (2020): 1-9.
29 - Georg Lukács, La ontología del ser social, vol. 2, Principios ontológicos básicos de Marx (Londres: Merlin, 1978), 6.
30 - Sobre la cuestión de una revolución irreversible, ver Mészáros, Beyond Capital, 758-68; István Mészáros, The Challenge and Burden of Historical Time (Nueva York: Monthly Review Press, 2020), 251-53; John Bellamy Foster, " Chávez y el estado comunal ", Revista mensual 66, no. 11 (abril de 2015): 9, 11, 16.
31 - Marx y Engels, Obras completas, vol. 25, 105, 460-62. GWF Hegel, Hegel's Logic (Oxford: Oxford University Press, 1975), 207-20; John Bellamy Foster, The Return of Nature (Nueva York: Monthly Review Press, 2020), 16, 20.
32 - I. Lenin, Materialism and Empírico-Criticism (Moscú: Progress Publishers, 1964), 174.
33 - Karl Marx y Frederick Engels, Irlanda y la cuestión irlandesa (Moscú: Progress Publishers, 1971), 142; Foster y Clark, The Robbery of Nature, págs. 76-77.
34 - Tamás Krausz, Reconstructing Lenin (Nueva York: Monthly Review Press, 2015), 184.
35 - Frederick Engels, La situación de la clase trabajadora en Inglaterra, en Marx y Engels, Obras completas, vol. 4, 394. Véase el análisis de la obra de Engels en Foster, The Return of Nature, 177-97; Howard Waitzkin, The Second Sickness (Nueva York: Free Press, 1983), 70; Ted Allan y Sydney Gordon, The Scalpel, the Sword: The Story of Doctor Norman Bethune (Nueva York: Monthly Review Press, 1952), 250.
36 - Marx, Capital, vol. 1, 348-49. Sobre el análisis epidemiológico de Marx, véase Foster, The Return of Nature, 197-204.
37 - Sobre la concepción del proletariado ambiental y el Sur Global, véase John Bellamy Foster, Brett Clark y Richard York, The Ecological Rift (Nueva York: Monthly Review Press, 2010), 439-41.
38 - John Bellamy Foster, Hannah Holleman y Brett Clark, "El imperialismo en el antropoceno ", Monthly Review 71, no. 3 (julio-agosto de 2019): 70-88.

39 - Samir Amin, Modern Imperialism, Monopoly Finance Capital, and Marx's Law of Value (Nueva York: Monthly Review Press, 2018), 100-101.
40 - István Mészáros entrevistado por Leonardo Cazes, " La crítica del Estado: una perspectiva del siglo XXI ", Revista Mensual 67, no. 4 (Septiembre de 2015): 32-37; Mészáros, Beyond Capital, 187-224. El concepto de igualdad sustantiva en oposición a la igualdad formal, por supuesto, es paralelo a la famosa distinción de Max Weber entre racionalidad sustantiva y formal. Véase Max Weber, Economy and Society, vol. 1 (Berkeley: University of California Press, 1978), 85-86.
41 - Immanuel Kant, The Philosophy of Kant: Moral and Political Writings (Nueva York: Random House, 1949), 417-18; Mészáros, Beyond Capital, 193.
42 - Frederick Engels, El origen de la familia, la propiedad privada y el estado (Moscú: Progress Publishers, 1977), 72-73.
43 - Marx, Crítica del programa de Gotha, 9.
44 - Véase Lebowitz, The Socialist Imperative, 111-33.
45 - Sweezy, "El comunismo como ideal", 338-39.
46 - Chi Xu et al., "El futuro del nicho climático humano", Actas de la Academia Nacional de Ciencias 177, no. 21 (2020): 11350-55; Ian Angus, " 5 mil millones de personas pueden enfrentar un calor 'no habitable' en 50 años ", Climate & Capitalism, 9 de mayo de 2020.
47 - Michael Lebowitz, Build It Now (Nueva York: Monthly Review Press, 2006). Sobre cómo la visión de Marx del comunismo como ideal socialista era esencialmente un modelo de desarrollo humano sostenible, véase Paul Burkett, " La visión de Marx del desarrollo humano sostenible ", Monthly Review 57, no. 5 (Octubre de 2005): 34-62. Sobre la escala del cambio inicialmente, ver Andreas Malm, "Socialismo o barbacoa, comunismo de guerra o geoingeniería: algunos pensamientos sobre las opciones en tiempos de emergencia", en The Politics of Ecosocialism, ed. Kajsa Borgnäs y col. (Londres: Routledge, 2015): 180-94. Para obtener una noción completa de la creación de una civilización ecológica, consulte Fred Magdoff y Chris Williams, Creating an Ecological Society (Nueva York: Monthly Review Press, 2017).
48 - Sobre la Primera Internacional, véase Karl Marx, Sobre la Primera Internacional, ed. Saul Padover (Nueva York: McGraw Hill, 1973); George C. Comninel, Marcelo Musto y Victor Wallis, eds., The International After 150 Years (Nueva York: Routledge, 2015).
49 - Estos comentarios sobre los planes de Chávez se basan en conversaciones con Mészáros, luego de una reunión de 2011 con el gobierno en Caracas, a la que ambos asistimos. Véase también István Mészáros, The Necessity of Social Control (Nueva York: Monthly Review Press, 2015), 199-217.
50 - Samir Amin, "Los movimientos audaces tienen que comenzar ", Frontline, 25 de mayo de 2018; Samir Amin, » Es imperativo reconstruir la internacional de trabajadores y pueblos «, International Development Economics Associates, 3 de julio de 2018.
51 - Samir Amin y Firoze Manji, " Hacia la formación de una alianza transnacional de pueblos trabajadores y oprimidos ", Revista mensual 71, no. 3 (julio-agosto de 2019): 120-26.
52 - Véase Vijay Prashad, The Darker Nations: A People's History of the Third World (Nueva York: New Press, 2008); Samir Amin, The Long Revolution of the Global South (Nueva York: Monthly Review Press, 2019). 2020, Volumen 72, Número 04 (Septiembre de 2020)