El grupo de consumo del SOV de Madrid convoca el día 28 de junio unas jornadas sobre consumo combativo.
Adjuntamos a continuación el orden del día del debate al que asistirán grupos de consumo y proyectos de producción autogestionados.
Organiza tu consumo y lucha.
ORDEN DEL DÍA
1. RELACIONES ENTRE GRUPOS DE CONSUMO Y ENTRE GRUPOS DE CONSUMO Y PROVEEDORES.
Apuntamos algunas cuestiones que interesan a los grupos de consumo y a los productores y que tratan del modo en que podríamos colaborar y reforzar nuestras relaciones.
a. Coordinación de pedidos. ¿Cómo podemos coordinar pedidos para ahorrar costes de transporte, llegar a pedidos mínimos, etc.? ¿Es factible sostener una central de abastecimiento de grupos de consumo?
b. Bases de datos, bancos de recursos, etc. Una base de datos común en la que incorporemos, por ejemplo, los productores que nos suministran podría ser útil para conectar a éstos con grupos que busquen nuevos productos. También podría ser útil para poner en común nuestro conocimiento de estos productores y sus productos y empezar a ensayar una certificación participativa.
c. Certificación participativa. ¿Qué factores habría que tener en cuenta para certificar los productos? ¿Con qué criterios se valoraría a los productores?
d. La racionalización de la distribución. Hay bastantes productores de la región de Madrid y alrededores que, por distintas razones, se encargan por sus propios medios de la distribución y suministran a casi los mismos grupos de consumo en el mismo día de reparto. En estos días de reparto, es frecuente que circulen 6 o 7 vehículos por Madrid haciendo rutas muy parecidas. ¿Hay forma de racionalizar esta distribución, evitando el impacto medioambiental y ahorrando a los productores gastos en combustible y tiempo de trabajo? ¿Cooperativa de distribución? ¿Logística p2p? ¿Central de abastecimiento? ¿Alguna otra solución?
e. Comunicación. ¿Cómo podríamos potenciar la comunicación entre todos y todas? ¿Qué herramientas serían las más adecuadas?
2. COMPRAS COLECTIVAS
¿Por qué renunciar a la organización total del consumo, limitándonos sólo a los productos alimenticios? ¿No será mejor consumir organizadamente los productos y servicios básicos que consumimos desorganizadamente por nuestra cuenta en nuestro día a día (bombillas, pilas, combustible, telefonía, etc.)? Citamos para el debate dos fragmentos de un texto del grupo de consumo La Granada:
En el mercado capitalista, toda compraventa es una negociación entre partes contrarias. Llamamos compra colectiva a la compra organizada en red con el objeto de conseguir mayor poder de negociación frente a las empresas capitalistas, la parte contraria.La utilidad inmediata de la compra colectiva es la obtención de descuentos en los precios. Pero la compra colectiva como herramienta del consumo revolucionario tiene muchos más usos: control del impacto ambiental en los procesos de fabricación y distribución, mejora de la calidad de los productos y servicios, defensa de los derechos de los trabajadores y trabajadoras asalariadas, etc.
3. MONEDAS SOCIALES.
En las actuales circunstancias, en que muchas personas están dejando de consumir en grupos de consumo por falta de euros y hay productores que lo están pasando mal por el descenso de ventas consiguiente, las monedas sociales podrían incrementar el flujo de intercambios y fortalecer los lazos de confianza comunitarios.
La Organización del Consumo | Red de Colectivos Autogestionados | RCA
Fuente- 28 junio: Jornadas grupos de consumo | Sindicato de Oficios Varios - Madrid
_____________________
Los medios de producción masivos no los podemos tomar ni gestionar por el momento, pero nuestras necesidades más básicas siguen insatisfechas ¿Porqué limitarnos a organizar lo que ya hay? El evento clave es la obtención de un almacén, sin el cual es infinitamente más difícil organizar la redistribución. El almacén a demás se puede usar de Taller-Escuela o instalar maquinaria llegado el momento. La maquinaria a pequeña escala ha quedado obsoleta por el valor de mercado, pero no es despreciable el invertir en ella, emplear a personas en un área productiva y que cubran sus necesidades con el producto autogestionado.
La autogestión de los bienes fue una de las labores revolucionarias más importantes para los Comités de Defensa, organizando los Comités de Abastecimiento y estableciendo una red de almacenes. Sin su organización a partir de 1933 no hubiese sido posible la revolución 3 años más tarde. ¿Cómo es posible que con nuestras capacidades tecnológicas seamos incapaces de volver a crear esta red, aunque sea en miniatura?
Un grave problema es que este sistema autogestionario no paga facturas ni impuestos obligatorios en el sistema capitalista, luz o telecomunicaciones. Al Estado no se le puede pagar en especia. Tampoco sirve para pagar rentas ni hipotecas. Este es el verdadero freno del sistema autogestionario. El intercambio, la sumisión al antagónico se hace inevitable y muchas personas prefieren trabajar en la "quimera" de tomar los medios de producción que eslomarse haciendo "horas extras, gratis", por la autogestión. Las soluciones posibles son parciales y solo la liberación des espacio resuelve el verdadero problema especulativo. Hay que minimizar las fuentes de dependencia al máximo. Es necesario crear entonces cooperativas cuyos beneficios no vayan a sus miembros, sino a un fondo común.
Como vemos, el camino de la autogestión no es un camino de rosas. En cuanto contemplas el problema te das cuenta de la magnitud. Pero también nos damos cuenta que la solución a la autogestión es más autogestión y una ruptura, aunque difícil, con el sistema capitalista.
Autogestión Ya y para todos!
El cooperativismo es una puerta abierta a la autogestión, eso sí para organizarse de forma revolucionaria dentro del capitalismo tiene que hacerse que todos sus miembros acuerden desarrollar un esfuerzo común a un mismo o parecido nivel, para obtener producto o servicio de la misma altura, puesto que sino es un mal ejercicio. Sabiendo que no a caído todavía la economía monetaria mundial, solucionar el tema de la compra con moneda social no está nada mal, el tema de tener que administrar y repartir el dinero que se ingrese de la venta para gastos propios de cada uno convierte esto en un trabajo y en una fuente de ingresos también ya sea capitalista o pseudocapitalista.
ResponderEliminarSalud y revolución social.
Oskar
Hola Oskar. Me interesa saber qué opinas sobre el problema de "la transición" esto es, tener que mantener un trabajo capitalistas mientras haces un trabajo para tú comunidad implica una sobrecarga que muchas veces es inaceptable para los miembros. Por otra parte todos tienen que pagar sus facturas, el diezmo capitalista: impuestos, casa, electricidad, gasolina, transporte, comunicaciones... esto incrementa exponencialmente los gastos.
ResponderEliminarSalud!
Hola Pablo, opinión es un concepto que lo tengo tiroteado porque sale de dentro y no vale para nada, como la mierda de perro, por lo tanto te espondré lo que pienso por si vale, hermano. En cuanto a la dependencia del capitalismo por parte de los mortales, es evidente como ya sabemos, por ello la labor que toca para llegar a la autosuficiencia, la autogestión y a la emancipación no es fácil que se diga, por lo que tenemos que convencernos y tenemos que poner nuestra vida en ello sabiendo que es nuestro único camino para llegar a ser libres. Si nos dedicamos a la revolución en nuestro tiempo libre, como si fuera u jobi, es mejor que nos dediquemos a pintar, a patinar, a correr o cosas de esas que valen para entretenerse sin ninguna trascendencia, porque la revolución social precisa estar presente de forma integral en nuestra vida.
ResponderEliminarSalud y revolución social.
Oskar
Por ahora es más fácil de decir que de hacer, las experiencias anarquistas son muchas, pero las autogestionarias se cuentan con una mano. Todavía no conozco una cooperativa que haya aguantado más de 4 años. Seguro que las hay pero no las conozco.
EliminarSé que hay pueblos autogestionados, pero su labor se centra más al interno y en la gestión diaria que en la extensión de la red. No parecen por la labor de expandir el ideal ni el modelo. He acudido a alguna charlas pero no se han llegado a compromisos. No faltan las ideas, falta la voluntad, que como tú bien dices, se hace día a día, de una forma seria (aunque con alegría!) y no como un juego.
Salud!
La cooperativa integral catalana en la cual trabaja Enric Durán, conocido por su espropiación a distintos bancos y en la que se integran organizándose alrededor de 15.000 gentes, a distintos niveles, es la referencia ahora mismo. Va camino de diez años de andadura y sigue su rumbo garantizando productos de primera necesidad intercambiándolos por trabajo, moneda social o dinero del banco européo, que también. Me imagino que ya la conocías, un abrazo, hermano.
ResponderEliminarSalud y revolución social
Oskar