Los piquetes son signo de un sindicalismo fallido.

Si la labor sindical en las empresas se hubiese realizado correctamente, si el estado no hubiese comprado a los sindicatos con subvenciones y liberados, no hubiesen sido necesaria la formación de tantos piquetes, ya que los trabajadores, menos los coaccionados o reaccionarios, estarían en la calle.

Advertimos: querido gobierno, no baje usted la guardia, no deje usted de dar dinero a los sindicatos amarillos, ya que son el "gigante dormido" a base de dinero que no es más que soborno. 

El día que se corten los suministros a estos vendeobreros se desvertebrarán y se desarrollará el verdadero sindicalismo, que no es más que trabajadores, y no políticos, defendiendo sus derechos y puestos de trabajo.
Ejemplo de político fallido, que no se da cuenta de lo que sucede a su alrededor, es Esperanza Aguirre, quien asegura que los sindicatos "caerán como el muro de Berlín". Incapaz de ver la necesidad de este sistema espera la caída de sus adversarios-colaboradores. El día que estos sindicatos caigan ella tendrá que salir corriendo.
http://www.publico.es/espana/427685/esperanza-aguirre-estos-sindicatos-caeran-como-el-muro-de-berlin
Sindicatos subvencionados: sois una lacra y una vergüenza.