lunes, 27 de febrero de 2012

El Gobierno admite el fracaso de las administraciones públicas

Tan claro como el día que el Gobierno es conocedor de la incapacidad de las distintas administraciones públicas: de Comunidades, provincias, ayuntamientos y incluso empresas públicas; de pagar sus deudas por sí mismas . Ha decidió saltarse su soberanía y reconocer su imposibilidad funcional para hacer frente a dichas deudas y saldarlas diréctamente.
No es la primera vez que se intenta que el ICO pague la cuenta. Se intentó en 2009 y 2011. Este nuevo anuncio no nos pilla por sorpresa.
http://www.publico.es/espana/384902/el-ico-pagara-parte-de-las-deudas-de-los-ayuntamientos-a-las-pymes
http://www.europapress.es/salud/asistencia-00670/noticia-cantabria-gobierno-estudia-acudir-creditos-ico-pagar-deuda-farmaceutica-20120206132403.html

Las empresas reciben todo tipo de ayudas, beneficios y privilegios, mientras que a las personas físicas se les somete a un estricto control legislativo y policial, cargas fiscales impositivas y abusos con tal de satisfacer los requerimientos gubernamentales y empresariales. El último de estos ataque a sus libertades lo recibe de la infame Reforma Laboral.

De la situación se concluye que una administración incapaz de cumplir sus compromisos está, mal diseñada, mal gestionada y manipulada, lo cual la hace a medio plazo insostenible. Es un medio de lucro de caciques con escusas ideológicas.

El gobierno de derechas no tiene como célula social a la familia como preconiza sino a la empresa, la cual no deja de recibir ayudas y prebendas de todo tipo.
Se ha decidido a tratar a los súbditos como herramientas a la completa disposición del empresario, un paso más a la nueva esclavitud.
De la nueva condición laboral y legislativa se determinará una nueva estructura social y la sudamericanización de España. 
La sociedad desesperanzada y resignada contempla cómo sus propuestas de reforma son constantemente negadas. Es incapaz de ejercer su soberanía porque se encuentra sometida a poderes fácticos y represivos, tanto de derechas como de las izquierdas en el poder.
De todos modos la sociedad no quiere organizarse, no quiere ser adulta, no quiere tomar las riendas de su vida. Esta satisfecha con el sistema, el desarrollo de las manifestaciones populares hasta ahora lo corroboran.
Bien venidos al neofeudalismo.
El estado puentea cuando le conviene la soberanía institucional. Se decide a pagar la deuda con las empresas que no han cerrado para evitar su quiebra y esperar que funcionen. Pero este trato no lo reciben los individuos. Se prefiriere que las personas con problemas económicos cumplan íntegramente con sus deudas a modo de condenas.

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